El Nàstic es consciente de que lo de mañana ante el Cornellà es una final por la salvación. Sin más dilaciones. En esta clase de partidos se necesita experiencia y corazón. Futbolistas con carácter a los que no les tiemblen las piernas en los momentos de la verdad. Por suerte, Dani Vidal cuenta con dos jugadores que apuntan al once titular. Manu García regresará tras cumplir los dos partidos de sanción por la roja directa por protestar vista ante el Atlético Baleares. Pol Domingo volverá aprovechando la baja de Alexandre Tirlea que no estará en el Nou Estadi tras ver la quinta amarilla en la victoria en Las Gaunas ante la UD Logroñés. La experiencia y el corazón.
A Manu García siempre se le echa de menos porque cualquier equipo lo haría. Es uno de los mejores porteros de la categoría y de eso no hay ni un tipo de dudas. Para mucho y transmite una sensación de seguridad que el equipo agradece. Además tiene ese carácter forjado a base de partidos a sus espaldas que le hace ser un referente en todos los equipos. Vuelve tras ser héroe de manera efímera. Marcó el gol del empate en la agonía ante el Baleares con la cara, pero el árbitro interpretó que lo hizo con la mano para desespero del sevillano. Su reacción fue desmedida y vio la roja. Luego le cayeron dos partidos y el Nàstic ha tenido que jugar dos partidos clave por la salvación con el joven Dani Parra. En el primero tuvo un error que costó caro, pero en el segundo salvó las castañas del fuego con varias paradas de mérito.
El caso de Pol Domingo es totalmente distinto. El lateral de la Pobla de Montornés ha perdido el sitio en las últimas semanas porque Alex Tirlea ha ofrecido un rendimiento mayúsculo en el lateral derecho. El rumano aprovechó la lesión de Pol Domingo ante la Real Sociedad B para sumar titularidades y conseguir su mejor versión en toda la temporada. Ha sido un lateral profundo y que ha cargado al equipo de argumentos ofensivos.
Todo lo contrario puede ofrecer un Pol Domingo que volverá mañana al ruedo. El canterano de la Pobla de Montonés si por algo destaca es por su fiabilidad defensiva. Un futbolista ideal para partidos cerrados en los que los detalles decantan la balanza. Defensivamente es impecable en un carril diestro en el que no suele sufrir porque tiene piernas e inteligencia táctica para frenar al adversario. No se conoce todavía un extremo rival que le haya descosido y eso da tranquilidad para encuentros en el que los fallos valen doble por lo igualado y la situación de nervios que va a haber en el feudo grana mañana.
Lo cierto es que durante toda la temporada ha vivido una bonita lucha con Tirlea por el lateral derecho y ambos han conseguido ofrecer un buen rendimiento, aunque cada uno aportando más en las características del juego que mejor dominan.
El Nàstic recupera la experiencia y el poso de Manu García bajo palos y la capacidad defensiva y el corazón de Pol Domingo para el carril derechoo. Necesita su mejor versión. La permanencia está en juego.
El Nàstic recibirá mañana domingo al Cornellà en el Nou Estadi a las 18.30. Si gana, podría asegurarse la salvación.