El empate sin goles frente a La Nucía de la jornada pasada no fue un resultado dulce para un Nàstic que pudo ganar. Sin embargo, el equipo sumó y sobre todo volvió a dejar la portería a cero por tercera vez, la segunda consecutiva, en los últimos cinco partidos.
Esto es un hecho que habla muy bien de la mejora defensiva y que sobre todo ha ayudado a Manu García ha batir un récord del que el portero sevillano y el Nàstic pueden estar muy orgullosos. El meta sevillano es el primero de la categoría en llegar a la cifra de 30 partidos en los que no ha encajado ni un solo gol. Lo ha conseguido en dos temporadas y tras disputar en concreto 64 partidos. Es el primero que lo consigue en Primera RFEF y otro registro que le refrenda como uno de los mejores porteros de la categoría.
En la Nova Creu Alta buscará sumar su 31º partido dejando la portería a cero en Primera RFEF. Un dato que seguro que dejaría al Nàstic mucho más cerca de la victoria.