Marc Montalvo decidió prodigarse en un arte en el que no es un especialista ni apunta a serlo. Por eso cuando marcó el gol de la victoria frente al Barakaldo en los minutos finales reaccionó con una sensación extraña. Parecía no comprender bien lo que había sucedido hasta que apareció Antoñín Cortés directo hacia él para recordárselo. Acababa de convertirse en el goleador de un triunfo de alivio para los granas. Su primer tanto en el Nou Estadi, en ese escenario que le ha visto crecer partido tras partido hasta convertirse en una pieza importante del primer equipo. Marcó su segundo gol con el Nàstic, el primero fue en Las Gaunas hace dos temporadas atrás, en su partido oficial número 99. La semana que viene frente al Zamora será un jugador centenario.
El debut que se hizo esperar
La historia de Marc Montalvo con el Nàstic es curiosa porque su debut con el primer equipo se hizo esperar. El canterano, que entró en la cantera grana en la edad de benjamín con 8 años, tuvo a Raül Agné como gran valedor en el banquillo. El técnico de Mequinenza le fogueó en los entrenamientos durante toda una temporada. Fue en el curso 2021-2022 en el que el centrocampista entrenó de manera diaria con los grandes, pero solo jugó un minuto frente al Real Madrid Castilla en un triunfo grana por 1-0.
El mensaje de Raül Agné: «El proceso es fundamental»
Raúl Agné explicó los motivos de aquel efímero y tardío debut que no llegó hasta el mes de febrero: «Marc Montalvo sabe cuál es el proceso. Yo creo mucho en la cantera, pero esto requiere de un proceso y se comienza por saber que es un vestuario profesional, entrenar con el primer equipo... Yo quiero que lleguen y se consoliden. Lo demás es vender humo».
Consolidación en el primer equipo
El tiempo ha demostrado que Agné no hablaba en vano. Montalvo ha llegado y se ha consolidado porque Dani Vidal, su segundo por aquel entonces, le había formado en la cantera y no dudó en seguir dándole cancha en el primer equipo.
Eso sí, fue el propio Raül Agné el que un año después de su debut le abrió las puertas del primer equipo de manera total. No lo hizo para que se convirtiera en un jugador residual porque su momento había llegado. La confianza del entrenador grana fue total desde un primer momento. Iñaki Alonso y Dani Vidal, los otros entrenadores durante aquel curso, también confiaron en él. En total acabó con 35 partidos en sus botas y 29 titularidades.
Competencia y superación: un reto constante
El año pasado, ya con Dani Vidal como primer entrenador desde el inicio, Montalvo pagó cara la competencia. Óscar Sanz, Ander Gorostidi y Borja Martínez le plantaron batalla, aunque sumó 34 partidos y 17 titularidades. Eso sí, a la hora de la verdad, en el playoff de ascenso, solo sumó un minuto en el verde en la final trágica ante el Málaga.
Aquel decepcionante final de curso provocó que Montalvo se plantease un futuro lejos de Tarragona. La opción del Betis Deportivo apareció en verano, pero el Nàstic no contempló su salida, pese a haber fichado a Álex López, otra amenaza para sus minutos.
Superando obstáculos y con mejoría constante
Marc Montalvo ha demostrado esta temporada que no le teme a nada ni nadie. Tras un inicio con dos suplencias consecutivas, el mediocentro de Riudoms se sobrepuso y este año ya suma 25 partidos y 18 titularidades. La competencia sigue existiendo, pero su rendimiento está siendo firme en muchos encuentros de la temporada.
Al de Riudoms, que acaba contrato el 30 de junio de 2026, se le está observando una clara mejoría en otras facetas del juego. Ese mediocentro que jugaba con calma y paciencia en la base está siendo un centrocampista cada vez más completo. Ahora posee la virtud de sumergirse con consistencia en el ida y vuelta, amenazar con llegadas de segunda línea y ser cada vez más poderoso en el cuerpeo porque su cambio físico es notable.
«Es un sueño marcar un gol en el Nou Estadi»
«Es un sueño marcar un gol en el Nou Estadi», aseguró tras estrenarse como grana en casa. Marc Montalvo en Zamora logrará otro hito: 100 partidos de grana. El tiempo vuela.
