SPiSP y Barça se vieron de nuevo las caras después de la final de la Lliga Catalana. De nuevo, los rojillos consiguieron levantarle el 0-2 al Barça y llevarse un triunfo épico con una nueva remontada en el quinto set.
El encuentro arrancó reñido. Los tarraconenses aguantaron el pulso con el Barça gracias a los errores en el servicio de los azulgranas y se mantuvieron a unas distancias cortas. Con el 7-9 en el marcador, un parcial de 0-4, que rompió Corredeguas con un punto largo, complicó el primer set.
El SPiSP consiguió no descolgarse. Se situaron hasta tres veces a solo tres puntos e incluso pusieron el miedo en el cuerpo de los visitantes con el 22-24. A pesar de la resistencia, el Barça se llevó el set.
Los rojillos conservaron el buen momento con el que había terminado el primer set. Aunque el SPiSP consiguió no despegarse en el luminoso en los compases iniciales (5-5), otro doloroso parcial, esta vez de 1-7, puso cuesta arriba el 1-1. Los locales fueron incapaces de reaccionar y el Barça amarró el 0-2.
Como en la final de la Lliga Catalana, tocaba tirar de épica. Los tarraconenses consiguieron hacer creer a los suyos con un arranque arrollador. El set se convirtió en un toma y daca con diferencias mínimas. El SPiSP no dio su brazo a torcer y, superados los quince puntos (16-13), tomó mayor ventaja. Con el 24-19, el Barça trató de revertir la situación, pero ya era demasiado tarde.
El guion del cuarto set se asemejó al del tercero. Igualdad en el luminoso y pequeñas ventajas de los locales, que se desvanecieron en los últimos puntos. El potente saque de Osorio ponía a los rojillos cuatro puntos por debajo (18-22) sin tiempo de reacción.
Los azulgranas habían ido todo el set a remolque, pero se habían rencontrado con la versión de los primeros minutos en el momento decisivo del partido. El SPiSP consiguió un parcial de 5-1 que devolvía las tablas, después de un error clamoroso de Osorio en un remate fácil. Había nerviosismo y lo aprovecharon para conseguir el 2-2 con un ajustado 26-24.
En el set definitivo, los locales presumieron de fe al levantar un 1-8 en contra y conseguir la victoria gracias a un igualado set por 16-14.