Juan Camilo Becerra fue uno de los grandes protagonistas de la victoria. Marcó un gol sanador para un futbolista llamado a marcar las diferencias, pero que ha tenido que convivir con el ostracismo. Su primer tanto como grana fue de puro ADN de killer: «Es una característica que debemos llevar los delanteros. Tenemos que ser celosos en el área. Ha sido un rechace que llega después de que el portero pare el penalti y estoy atento y puedo rematar. Estoy muy contento con el gol y con la victoria sobre todo».
El ariete grana confirmaba que no están siendo meses fáciles para él, pero lo comentó con naturlidad: «Llegué con muchas expectativas y, en general, está siendo un año complicado. Este gol lo necesitaba».
Preguntado sobre si sentía que había dado un golpe en la mesa, afirmó: «Nunca me sentí una estrella. Es gratificante tener minutos y poder haber marcado. Me mantengo en mi posición de trabajar día a día y partir de ahí sé que los resultados se irán dando».
Dani Romera fue el otro gran héroe de la victoria con un doblete que necesitaba: «Estoy muy reliz. Sabíamos que era un partido importante. Son tres puntos relevantes».
El delantero almeriense recalcó también que era importante marcar, pero no era un asunto que le obsesionaba: «Me he quitado un peso de encima. Tengo buenas sensaciones y sabía que el gol iba a llegar. Sé que los delanteros viven de los goles, pero yo no estaba obsesionado. Pienso que estaba jugando bien y esto son rachas. La primera que tengo hoy es difícil de cabeza y la meto. Hoy tenía que llegar y en el mejor momento. Nos quedan siete finales».