El entrenador del Nàstic, Raül Agné, se mostró descontento por el juego de su equipo en algunos tramos del partido y por ello cree que deben mantenerse alerta. Aun así, decía estar liberado por sacarse de encima una Copa Catalunya «que nos ha dado muchos quebraderos de cabeza». El equipo perdió el último partido de la pretemporada contra el Olot y afronta la estrena en la liga con muchas lesiones en el equipo y preocupación. Precisamente a ellas se ha referido el técnico grana, quien admite que «tenemos muchas bajas» y que «a ver si vamos recuperando gente».
Del partido, detalló que su equipo había competido bien y que en la segunda mitad querían intentar darle la vuelta a un final del primer tiempo «muy malo». «En el último cuarto de hora de la primera mitad no hemos tenido una buena actitud ni la intensidad necesaria», comentó Agné. Para él, jugar la Copa Catalunya este año ha dado más problemas que beneficios, por eso destaca que «se han quitado de encima» la competición.
El entrenador de Mequinensa destacó que «ahora llega la hora de la verdad» en la estrena de la Primera RFEF de este domingo contra la Unión Deportiva Logroñés. El técnico piensa que será muy diferente a lo visto hasta ahora y que tienen ganas de competir, pero también de recuperar a los lesionados.
Aunque se perdió, Agné busca la parte positiva del último test antes de la hora de la verdad. Cree que es el primer momento realmente malo que tienen sus jugadores en estas semanas de preparación. «Ya nos va bien llegar con la orejas en punta. El cuarto de hora malo que hemos tenido nos dice que tenemos que estar alerta», decía el técnico.
También tendrán que estar con los niveles de atención y de concentración altos por las lesiones que tiene el equipo. Como detalló Agné, en cada línea hay una. «En la defensa tenemos a los laterales, en el medio nos falta Pedro del Campo y arriba estamos muy limitados, ya que también tenemos la baja de Aarón». Por eso, no descarta tener que mirar mucho en el mercado de fichajes que se cerrará el 31 de agosto.
Para ese final, Agné reconoce que «todo lo van a decidir por el bien de la entidad» y que «tenemos una limitación en las fichas». Además, la baja de Lupu, que ya fue operado de la mandíbula, también condiciona a tener que buscar un delantero.
El que ya ha llegado es Guillermo Fernández, de quien Agné destacó que «hace años que marca goles, con una media de entre siete y ocho». También comentó su experiencia en Primera y Segunda División, y también que jugó un partido en Champions League. De los delanteros, el técnico reconoce que quiere que «corra, fije los centrales, se mueva bien y que no sea solo de referencia».
El técnico ya está pensando en el partido de este domingo contra la UD Logroñés a las 19:30 horas en el Nou Estadi y que será la estrena del equipo. Lo hará con las bajas sensibles de jugadores importantes, como son Joan Oriol o Pedro del Campo.
Precisamente, la posición del de Figueras la tiene que ocupar Gorostidi, quien volvió a jugar contra el Olot y de quien Agné dijo que «ha demostrado el tipo de jugador que es, aunque el ritmo de competición con el que llega es mucho más bajo de lo normal».