La Superliga griega se ha convertido en un mercado apetecible para los jugadores emergentes del fútbol español. En los últimos tiempos, el fútbol heleno ha invertido mucho en la importación de futbolistas internacionales, sobre todo porque en su campeonato también se han instalado algunos propietarios con buen poder adquisitivo. El balonpié tarraconense tampoco es ajeno a ese mercado y algunos representantes ya han decidido dar el paso hacia Grecia.
Cuando Jorge Díaz (Montevideo, 1989) salió del CF Reus, en verano de 2017, barajó distintas opciones antes de decidir su nuevo destino. Incluso se habló de una posibilidad de última hora para quedarse en la capital del Baix Camp. Desde plena adolescencia, Jorge se había afincado en Cambrils, por lo que Reus le ofrecía la posibilidad de quedarse en casa. En cambio tomó la determinación de emigrar hacia Grecia, a un lugar y a un club con poco nombre dentro del universo futbolístico. Se trata del Panetolikos, en el que hoy ya vive como auténtico referente. Esta temporada luce brazalete de capitán.
El Panetolikos pertenece a la ciudad de Agrinio, de casi 100.000 habitantes. El club, fundado en 1926, mantiene en el argentino Osmar «El Malevo» Ferreyra su principal leyenda histórica. Seguramente, después de tres cursos vistiendo esa camiseta, Jorge Díaz, va a disfrutar de un status similar en el futuro. El cambrilense ha formado con frecuencia en el once titular y su juego eléctrico y desequilibrante ha coquistado a los apasionados hinchas de la entidad. En el actual trayecto acumula 16 apariciones y ha anotado un gol.
Jorge Díaz responde al perfil de atacante versátil, capaz de ocupar las tres posiciones del enganche, aunque su zona de influencia natural se ubica en la banda derecha. De tren inferior privilegiado, al extremo siempre le ha perseguido la irregularidad en su rendimiento. En el fútbol nacional, figuró en clubs de postín como el Albacete o el Zaragoza, en Segunda División, justo antes de regresar al Reus, donde se impulsó en sus inicios como semi profesional. Su Panetolikos lucha a capa y espada por evitar el descenso. De momento ocupa el penúltimo lugar de la Superliga, con ocho puntos.
Vélez, en Salónica
Salónica, considerada la segunda ciudad de Grecia, con algo más de un millón de habitantes, Recibió en 2018 al tarraconense Fran Vélez (Tarragona, 1991), un central de imponentes fundamentos físicos, que se formó en el Nàstic y pasó por el Almería, antes de inaugurar su aventura en el fútbol extranjero. En la 2017-18 había militado en el Wisla Crackovia de Polonia, donde coincidió con un viejo conocido como Kiko Ramírez, técnico del Wisla en ese instante. Polonia se transformó en la antesala de Grecia para Fran, que acumula su segundo curso en el Aris, uno de los grandes clubs del país, con gran tradición en el baloncesto.
La aportación de Fran Vélez, hermano del histórico defensa del fútbol provincial Ñoño, no ha defraudado al Aris, que le considera pieza fundamental en su sistema defensivo. A pesar de exhibir su mejor rendimiento como central, Vélez también se ha adaptado, en algunas ocasiones, a la posición de pivote defensivo. En Salónica ha descubierto en nuevo hábitat para desarrollar su juego. Ha disputado 13 partidos y ha marcado un gol en el presente del campeonato, con el Aris metido de lleno en la zona noble. Es sexto con 22 puntos.
Fran Vélez vive la enorme y feroz rivalidad que protagonizan en la ciudad de Salónica su club, el Aris, y el Paok, que lidera la Superliga.
Reina el PAOK
De hecho, el PAOK Salónica goleó al Atormitos (5-1) y acabó el 2019 como líder. El cuadro que entrena el portugués Abel Ferreira aprovechó el tropiezo del Olympiacos el domingo, que empató sin goles ante el Volos, para asaltar la cima de la clasificación, con dos puntos de ventaja.
Fue el Islandés Sverrir Ingason el hombre del partido. Marcó dos de los cinco tantos de su equipo, que sentenció el choque antes del descanso. Sin embargo, la cuenta la abrió el portugués Vieirinha antes del cuarto de hora. Con el posterior doblete del escandinavo se alcanzó el descanso.
El PAOK asentó su cuarto triunfo seguido con los tantos del polaco Karol Swiderski y el del croata Josip Misic, mientras el húngaro Roland Ugrai hacía la única diana del equipo visitante, que acumula dos partidos sin ganar y que está fuera de los seis primeros puestos.
El conjunto de Salónica, no conoce la derrota en dieciséis partidos, lidera la clasificación con dos puntos de renta respecto al Olympiacos.