¿Cuántos de vosotros habéis deseado matar a alguien alguna vez? Sin ánimo de despertar el instinto criminal del público, el Festival de Novel·la Criminal en Català, Creixell.Crims se despidió ayer. Durante dos días ha sido la guarida perfecta para todo tipo de personajes con mentes perturbadas, a través de relatos de ficción, ávidos de atrapar a los lectores. Ayer, la ‘escena del crimen’ fue Cal Cabaler y los protagonistas los escritores Jordi Dausà, Damià del Clot y Pere Figueras.
El autor Jordi Dausà habló del libro Manual de supervivencia, galardonado en 2010 con el premio Montflorit de novela, y que ahora el autor ha revisado y actualizado de la mano de Pagès Editors. «Escribí Manual de supervivencia con poco más de veinte años. Entonces, llevaba una vida más desordenada de la que llevo ahora, por lo que la novela refleja como vivía en aquella época», explicó el escritor.
Una jornada a la que también asistió Damià del Clot y su Breu Enciclopèdia del Crim (Pagès Editors). «La novela es hija de la pandemia. Por aquel entonces, las reuniones empezaban a las ocho de la mañana y terminaban a media noche. De dos horas aprovechables, estaba 24 horas frente a la pantalla», rememoró el autor. Fue esta desidia la que un día le empujó a «abrir un Word y empezar a escribir ideas criminales, para pasar el tiempo». Tres meses después dio a luz al libro.
Por su parte, Pere Figueras acudió con su Fets Caldo (Editorial Alrevés), y revivió el carácter de Avel·lí Baldoví, un personaje de los que pasan por la vida sin pena ni gloria. «No tiene freno, por lo que no duda en eliminar a todo aquel que le molesta», aseguró el autor, quien a su vez reconocía que «la importancia del personaje radica en cómo su vida transcurre a través de una serie de agujeros como consecuencia de la podredumbre social; es decir, nunca es capturado porque sabe esconderse en estos recovecos en los que la sociedad no mira porque están lejos de la realidad».
Así es como Pere Figueras «abrió el melón», en palabras de Mònica Socias, conductora de la mesa redonda, de lo que es la novela negra: la crítica social. «En todas las obras existe de manera diferente, aunque en algunos puntos es la misma, porque la sociedad al final termina convergiendo en una misma dirección», añadió la conductora, a lo que Pere Figueras respondió que «si no hay crítica social, no es novela negra catalana».
Por ello, cuando se trata del género criminal, «siempre puede ser peor y no sabes nunca qué pasará». Y así es como comienza y avanza la novela Manual de supervivencia. Al respecto, Jordi Dausà reconoció que «me gusta hablar de aquello que no está a la vista».
Entonces, «la vida puede ser negra desde muchas miradas, hay que descubrirlas», afirmó Mònica Socias. De esta manera, Damià del Clot reconoció que «mi primer contacto con el crimen real viene de cuando ejercí en el turno de oficio como abogado de oficio en Barcelona. Eran causas perdidas, pero detrás de ellas había siempre una historia de necesidad», explicó el autor, quien confesó que «esto me hizo plantear si la justicia era justa con ellos».
Así que para hallar la respuesta, descubrir el desenlace y averiguar qué hace cada uno de los personajes, no queda más remedio que llegar hasta la última página.