Las noches de verano son mucho más bonitas y refrescantes si cerquita de casa tenemos el Nomad Festival, básicamente porque te invita a salir cualquier día de la semana, bailar a ritmo de The Beatles, El Canto del Loco o Fito y Estopa y que toda la familia, grandes y pequeños, pase un rato en libertad en plena naturaleza y bajo cielos estrellados. Así es el Nomad, un lugar que te hace feliz y aunque hayas estado en el de Torredembarra o El Catllar, no te importa repetir porque es garantía de diversión, desconexión y alegría.
Estos días y hasta el 18 de agosto en Masia Colina (antiguo Restaurant Les Fonts de Can Sala) se monta una buena fiesta con este festival itinerante que recorre Catalunya y que lleva todo un montaje espectacular a pueblos y ciudades de costa e interior con el único objetivo de invitar a la gente a pasar un buen rato a la fresca. El Nomad se ha convertido en una cita de esas que marcas en el calendario y aunque para muchas sea la primera vez hay que apuntar que el originario se celebró hace ya ocho años en Cervera y que desde entonces ha crecido mucho, tanto en la oferta como en número a lo largo del territorio.
Daniel Vicente, CEO del Nomad Festival, asegura que «nos sentimos felices y muy ilusionados de seguir organizándolo igual que el primer día. Nos emociona mucho afincarnos en Tarragona y seguir creciendo en todo su territorio. A partir de ahora, Tarragona ya es nuestra casa».
Desde que llegas y hasta que sales el Nomad es un cúmulo de buenas sensaciones. Los lugares escogidos por la organización siempre son espectaculares, o bien cerca de la costa con el mar de fondo o en plena naturaleza, como este nuevo espacio en la ciudad, Masia Colina, perfectamente decorado con puffs gigantes de colores, tumbonas, sombrillas elegantes, zonas verdes, neones para hacerse fotos y un montón de cosas más.
Paseando por el Nomad nos encontramos con Sílvia y Sandra. Son primas y van con Abril, Cloe, Martina y Aina, sus hijas. «Hemos venido a pasar un rato porque nos gusta mucho la filosofía del Nomad y hoy en concreto porque tocan The Ringos, que cantan las canciones de los Beatles y nos apetece mucho», cuenta Sandra. «Solo al llegar, hemos jugado un bingo musical muy divertido, en el que el DJ ponía canciones muy conocidas y de todas las épocas y tenías que marcar la casilla para hacer línea o bingo. Lo chulo era que en cada tema te levantabas a bailar y se montaba una buena juerga», explica Sílvia.
Espacio para bebés, oferta de pintacaras y tatuajes temporales, juegos de habilidad, microteatro, música, foodtrucks, mercado de artesanía, Karaoke, scape room y cada noche dos propuestas musicales distintas son algunas de las cosas que ofrece el Nomad Festival. Es la última oportunidad de disfrutar de él porque luego sigue su camino por otros municipios y hasta 2025 no volveremos a tenerlo en casa.
Es la última oportunidad de disfrutar porque hasta 2025 no volveremos a tenerlo en casa
