La violencia obstétrica que sufren (a veces sin saberlo) millones de mujeres, los conflictos en la adolescencia fruto de familias desestructuradas o la compleja conciliación de una madre soltera son algunos de los temas que narra la tercera temporada de Madres. Amor y vida de Aitor Gabilondo, que se acaba de estrenar en Amazon Prime Video.
En esta tercera entrega, la ficción creada por Gabilondo (Patria) y Joan Barbero (El príncipe) llega con ocho episodios nuevos que se vuelven a enmarcar en un hospital materno infantil y su universo de médicos, enfermedades y pacientes, pero contado con un especial énfasis en las historias de las personas cuya vida cambia tras entrar en un hospital.
«Es una serie muy verdadera que conecta realmente con la gente porque se sienten muy identificados. Es lo que marca la diferencia. El público sabe lo que es, van con los personajes y no necesitan más artificios», cuenta la actriz reusense Aida Folch, que interpreta a la doctora Olivia Zavala, una de las protagonistas de la serie.
Esta tercera temporada arranca casi un año después de convertirse en madre y la ausencia de Simón y la pasión por su trabajo hacen que le sea muy complicado conciliar su maternidad y su carrera.
«Vamos a ver cómo ha tenido una hija y cómo compagina su vocación de ser médico con la maternidad. Vamos a contar que no llega», explica la actriz. La doctora Zavala tendrá que enfrentarse además al conflicto surgido con un nuevo personaje, su amiga de la infancia, Raquel (interpretada por Hiba Abouk), que llega al Hospital Los Arcos llena de ilusión y emoción, pues está a punto de convertirse en madre.
Ella imaginaba un parto natural y con poca intervención médica pero termina por alargarse y, tras no dilatar, los médicos deciden hacerle una episiotomía y usar fórceps sin su consentimiento.
«A raíz de este papel pregunté y me di cuenta de que tengo mucha gente cercana que me contaban cómo fueron sus partos y lo más curioso es que muchas de ellas no sabían que habían sufrido violencia obstétrica», relata Abouk.
Meterse en la piel de Raquel, agrega, «ha sido un viaje maravilloso» pero «muy duro» porque es «una temática complicada» de la que «no se habla mucho». «Es un tema tabú, y hay que tratarlo con muchísimo respeto porque afecta a muchas mujeres y además cuando te afecta es para siempre», apunta.
«Cuando me quedé embarazada empecé a leer sobre esto, me importaba muchísimo. Recuerdo que en mi parto insistí mucho en cómo quería tenerlo y es verdad que hay una cierta tendencia a intervenir todo el rato de manera médica, cuando realmente un parto es lo más natural del mundo y casi no tendría ni que intervenir el médico», añade la actriz, que se convirtió en madre a principios de este año, fruto de su relación con el futbolista Achraf Hakimi.
Continúa en la serie, como uno de los pilares fundamentales, el personaje de Marian, interpretado por Belén Rueda. Pese a que su hija ya no está en el hospital, ella sigue vinculada al centro y se dedica, como voluntaria, a ayudar a los pacientes.
Con una trama principal centrada en un adolescente conflictivo, se abordarán temas como la desestructuración familiar, la drogodependencia, la acogida de menores o la paternidad.
Como caras nuevas en esta temporada está también la de un hombre, Carlos Bardem, que interpreta a Héctor, un personaje con el que se trata de ofrecer una nueva mirada y explorar una figura que, hasta ahora, ha permanecido en un segundo plano de la serie: los padres y la paternidad.