La Guía Repsol ha presentado esta semana la lista de Soletes con Solera, una distinción que homenajea la tradición de los negocios clásicos que han resistido al paso del tiempo como el empuje de los más jóvenes que han decidido apostar por lo auténtico. En total se han repartido 300 nuevos distintivos de este tipo en toda España, 5 de ellos en Tarragona.
El propósito de este premio es poner el foco en jóvenes cocineros que abren nuevas casas de comidas tradicionales o que recuperan bares antiguos en el centro de las ciudades. “Casas de comidas con arraigo, barras que podrían contar miles de historias o familias que han transmitido el oficio de abuelos a padres y de padres a hijos hasta convertirse en una institución”, explican desde la organización. Además, también se incluyen en la lista bares de toda la vida que apuestan por las recetas históricas de la gastronomía española.
“Queremos celebrar a quienes se han mantenido fieles a los sabores en los que se reconocen varias generaciones. Estos Soletes con Solera comparten una filosofía común que se nutre del entorno y la herencia recibida, tan vigente en pueblos y ciudades pequeñas y que en los últimos tiempos ha contagiado de ese arraigo a las grandes urbes y a una parte de los que están estrenando sus negocios”, ha explicado María Ritter, directora de Guía Repsol.
Cinco distinciones en Tarragona
Entre los establecimientos reconocidos en Tarragona se encuentran la Cooperativa Elena, situada en El Catllar. Un restaurante que ofrece los conocidos en Catalunya como “esmorzars de forquilla”, que se refiere a desayunos contundentes con platos como los callos, una de las especialidades de la casa. También ofrecen tapas artesanas y platos tradicionales y caseros.
Otro de los reconocimientos locales este 2024 ha sido para Gelats i Torrons Xixona, situado en Reus. Se trata de la unión de dos oficios históricos en la familia que nació en 1974, momento en que se produjo el traspaso de las dos heladerías de Los Valencianos de Cieza y el cierre del portal del Raval Santa Anna 6, que llevaba abierto desde 1885. Esto posibilitó abrir la heladería y turronería en el mismo número y calle; pocos años después, en 1984, abrirían la tienda de la Calle Llovera 26.
En Santa Coloma de Queralt se halla el Hostal Colomí, un restaurante dedicado a la cocina casera y con un entorno familiar y acogedor. El local cuenta con un comedor rústico donde se puede disfrutar de platos a la brasa elaborados en una parrilla que preside el salón principal y que está a la vista de los clientes. Todos los productos son de proximidad y con la más alta calidad.
En la costa encontramos el restaurante Les Fonts. Una insignia en Cambrils donde los arroces son los protagonistas. El restaurante nació en el año 2000, cuando Victoria y su marido Tino después de cuatro generaciones y treinta años faenando como patrón en el mar y ver el futuro de la pesca muy negro decidieron cambiar la barca por un pequeño establecimiento donde servir los platos que elaboraban a bordo.
En el corazón de la Terra Alta se puede disfrutar de la maravillosa cocina del “chup chup” de el restaurante Miralles. Un local donde la máxima son los productos naturales y de proximidad. Con agua de Els Ports, aceite local, pan artesanal, los corderos de crianza propia y pasto natural y las verduras del huerto, los dueños apuestan por la cocina tradicional actualizada.
