“El celo”, el nuevo libro de la escritora y editora Sabina Urraca (Donosti, 1984), es salvaje, incómodo y señala la existencia de un mundo deslavazado: el nuestro. La novela no comienza hasta pasadas las cien páginas, o algo más, pero tan solo es una cuestión de aclimatarse y de aceptar (o no) la ficción que se nos sugiere.
La realidad para la Humana, la protagonista, transcurre entre los recuerdos del Predicador (un novio que la convirtió en un recipiente seco), parques solos, el rechazo del cuerpo, dosis ingentes de napolexda, abrazos litúrgicos, un potente ansiolítico, una familia rara y un grupo de apoyo para mujeres víctimas de violencia de género. Hay igualmente un personaje deslumbrante e incorrecto, Mecha, que pertenece a aquel grupo y que es lo más sobresaliente de todo, lo más revelador.
La escritora teje un relato distanciado de la realidad con el fin de observarla y derrocarla mejor, con sus mismas armas
“El celo” es un proyecto complejo porque no existe una trama que estructure la novela, más allá de la peripecia entre la Humana y la Perra, que ya es bastante. Alivia que un ser animado, humano o no, te recuerde que no importa a la especie a la que pertenezcas, ya que a todas han intentado domesticarnos la boca, y lo importante es hacernos compañía ante ese asedio aterrador.
Una novela que se disfruta como un guiñol y que contiene un sinfín de referencias al mundo que habitamos sin auténticamente vivir en él
Lo relevante aquí es que la narrativa de Urraca despliega su universo con generosidad. Este libro es leal a la idea de que aún podemos creer en algo. El valor fundamental de “El celo” es el cuerpo agotado de la narradora: una voz que busca, busca porque nada va a encontrar en la realidad que merezca la pena o no aparentemente. Sabina Urraca confía en que solo en el lenguaje, solo escribiendo es como una consigue toparse con los grandes hallazgos del pensamiento y la memoria, y este libro tiene algunos y son valiosos: “Para traer a alguien de nuevo a este lado, hay que hacerle preguntas sobre su vida”, “Siempre seremos la especie invasora de alguien y alguien siempre será nuestra especie invasora. Somos nada más que eslabones de una cadena trófica”, “Sin la salsa de hablar de los otros, muchas amistades se deshidratarían” o “Vivir es ir estropeándose”.
título: El celo
Autora: Sabina Urraca
Editorial: Alfaguara, 2024
312 páginas