La Associació Joves i Esport de Catalunya de El Vendrell había informado al Ayuntamiento que desde un balcón el imán haría la llamada al rezo que se realiza el viernes antes del inicio del Ramadán, que es el 24 de abril.
La mezquita está cerrada por el obligado confinamiento. La explicación que se dio es que el imán realizaría esa oración desde una casa de la carretera de Valls, en el centro histórico de El Vendrell. Aunque finalmente se hizo desde la acera.
Pero en pocos minutos la calle se llenó de personas para seguir el rezo. Hasta una cincuentena de personas se concentraron saltándose el obligado confinamiento.
Sin multas
La Policía Local llegó frente a la vivienda de la que salió el imán con megafonía y observó la inesperada situación, pero según se ha explicado, no se pusieron denuncias.
El alcalde de El Vendrell Kenneth Martínez ha explicado que el Ayuntamiento tenía notificación de que desde un balcón se haría un rezo. «No había autorización para nada más porque el real decreto del gobierno lo deja muy claro».
Las imágenes han indignado a muchos vecinos que señalan que mientras ellos están confinados en casa, se haya producido esa concentración de personas sin que se haya actuado para impedirlo. Además del riesgo de contagio que puede suponer la acción.
Representantes de la asociación han lamentado la concentración y reiteran que sólo estaba previsto la llamada al rezo desde el balcón de la casa y que no se contaba con esa afluencia de personas en la calle. Sin embargo en El Vendrell se ha desatado una tensa polémica.