El próximo lunes, 1 de julio, es la fecha elegida para empezar el despliegue del sistema puerta a puerta en los barrios de Vilafortuny y el Molí de la Torre. Sin embargo, muchos de los vecinos continúan en desacuerdo con este modelo de recogida de residuos y así lo dejaron patente este martes en la reunión mantenida con representantes del Ayuntamiento de Cambrils y la empresa Secomsa.
La recogida puerta a puerta se prevé introducir en unas 2.100 viviendas y el objetivo, según defienden desde el consistorio, es mejorar los niveles de reciclaje para alcanzar los objetivos fijados por la UE. Mientras, hay muchos vecinos que se niegan a cambiar el sistema actual.
«Esto es insalubre. Estamos en una zona residencial, no de chabolas. No vamos a estar con todas las basuras colgando», dice una vecina, que considera que esta medida «va en contra del derecho a la libre movilidad de las personas» «Es una imposición unilateral. Nos lo venden como que va a ser una prueba, pero ya lo tienen implantado», denuncia.
Para poder analizar posibles acciones para echar atrás el sistema puerta a puerta, se ha convocado una reunión de vecinos este jueves por la tarde, a partir de las 19.30 horas, en el Centre Cívic de Vilafortuny.
