Cerca de mil personas pasaron en 2023 por el quirófano del Hospital Lleuger Antoni de Gimbernat de Cambrils. Tras ponerse en marcha en octubre del 2022, doce años después de inaugurarse, el equipamiento se ha afianzado a lo largo de 2023 y ha absorbido buena parte de la cirugía menor que hasta ahora se realizaba en el Hospital Sant Joan de Reus. De esta forma, destacan desde el centro, se han podido reducir las listas de espera en intervenciones de cirugía general, urología, dermatología y oftalmología.
En Cambrils, se programan operaciones a pacientes no sólo del Àrea Bàsica de Salut de Cambrils, sino de todo el Baix Camp. De momento, se trata únicamente de intervenciones sin anestesista –que sólo necesitan anestesia local– y que no requieren ingreso hospitalario.
Al inicio, el quirófano funcionaba cuatro días a la semana, pero ya hay dos semanas al mes en que hay actividad de lunes a viernes. La intención es crecer y seguir absorbiendo más operaciones.
«La pretensión era distribuir la oferta quirúrgica en el territorio y con estas instalaciones también acercábamos el servicio a la ciudadanía», destaca la doctora Francesca Mellado, directora asistencial del Hospital Universitari Sant Joan de Reus.
Con la puesta en marcha del quirófano, explica la doctora, «sectorizamos la actividad quirúrgica y resguardamos los quirófanos del bloque quirúrgico del Hospital de Reus para cirugías más complejas y que requieran ingreso. La intención era dar respuesta a listas de espera que se agravaron con los años de pandemia en el territorio y se ha conseguido».
«El quirófano nos ha permitido acercar el servicio a la población de referencia, mejorando las listas de espera de cirugías menores», celebra también Imma Grau, directora de los Serveis Territorials de Salut del Camp de Tarragona.
A lo largo de 2023, prácticamente la mitad de intervenciones que se realizaron, un 49%, fueron de cirugía general, donde se incluyen dolencias como lipomas, quistes sebáceos o varices. Un 38% de las operaciones fueron de urología, básicamente operaciones de vasectomía o de fimosis. En menor medida, también se llevaron a cabo intervenciones de dermatología (8%), por ejemplo extirpaciones de tumores en la piel con anestesia local, y oftalmología (5%), principalmente intervenciones en el párpado.
El objetivo es poder programar cirugía mayor ambulatoria, pero falta personal de anestesia
A partir de ahora, según explica la directora asistencial, la meta es poder programar en Cambrils cirugía mayor ambulatoria, es decir operaciones más complejas con anestesia, pero que no requieran hospitalización. Algo para lo que todavía no hay fecha. «Es una asignatura pendiente –reconoce–. Este quriófano está preparado para eso y ese es nuestro objetivo. Lo que falta es disponibilidad de profesionales, básicamente de anestesia». Algunas de las especialidades que también podrían operar desde Cambrils son otorrinolaringología o traumatología.
Doce años de espera
El Hospital Lleuger de Cambrils se inauguró en abril de 2010, después de una inversión de 10,6 millones de euros para ampliar y reconvertir el antiguo CAP. Era el primer hospital ligero de Catalunya, un concepto de centro sanitario sin habitaciones, que buscaba aunar en un mismo equipamiento la atención primaria y de urgencias, con servicios sanitarios de alta resolución gracias a un quirófano donde programar operaciones sin requerimiento de ingreso hospitalario.
El anuncio que se hizo en su día era que aquel mismo verano de 2010 el quirófano iba a estar operativo. Sin embargo, una serie de problemas técnicos lo impidieron. En diciembre de 2011, se desencalló el conflicto principal que existía entre el consistorio y el constructor para acabar las obras pendientes y se dio luz verde a su puesta en marcha. No obstante, el tiempo pasaba y se iban estableciendo diferentes calendarios que nunca se llegaron a cumplir, convirtiéndose en una demanda de todos los gobiernos que han ido pasando por el Ayuntamiento.
El 3 de octubre de 2022 abría finalmente el quirófano, con las primeras operaciones de urología que se realizaban en Cambrils. Las instalaciones, que se encuentran en la planta soterrada del hospital, constan del quirófano, una sala de curas que también puede acoger pequeñas intervenciones, cinco boxes de reanimación, sala de esterilización que se ha tenido que equipar –al inicio se traía el material esterilizado de Reus– y una sala de espera con butacas.