Tras más de una década de espera, el quirófano del Hospital Lleuger Antoni de Gimbernat de Cambrils se ha puesto por fin en marcha. Ayer lunes la sala de operaciones realizó sus primeras intervenciones quirúrgicas sin anestesista, una apertura que confirmaban al Diari la Entitat de Dret Públic (EDP) Salut Sant Joan de Reus-Baix Camp, que gestiona el equipamiento, y la Regió Sanitària Camp de Tarragona.
«Estamos muy contentos de poder abrir por fin este quirófano que dará servicio a los residentes en los municipios del Baix Camp», señalaban desde la EDP, que añadían que la sala se había podido abrir sin problemas puesto que en todos estos años de espera se habían ido haciendo las tareas de mantenimiento correspondientes para que, cuando llegara el día, se pusiera en marcha con total normalidad.
En su primer día en funcionamiento se realizaron cinco intervenciones, entre fimosis y frenillo. En el quirófano se podrán realizar operaciones quirúrgicas a pacientes sin comorbilidad –término médico para describir dos o más trastornos o enfermedades que ocurren en una misma persona- y sin requerir la figura de un anestesista. Por el momento, solo se harán operaciones con anestesia local, sin ingreso, y a corto plazo está previsto que la actividad sea diaria, de lunes a viernes.
«Esta ampliación de la actividad quirúrgica aportará, además de la comodidad al paciente de referencia, la posibilidad de mejorar la resolución de las listas de espera de estas intervenciones de cirugía menor», destacan desde la Regió Sanitària Camp de Tarragona.
Desde la EPD aseguran que, con el paso del tiempo, la actividad se irá incrementando para poder ofrecer intervenciones de cirugía mayor ambulatoria (CMA), pero no pueden confirmar por el momento una fecha en concreto. Cabe recordar que, cuando se confirmó que el Hospital Lleuger iba a contar con un quirófano, se detalló que se iban a hacer operaciones de las especialidades que ya tiene el centro, como Otorrino o Traumatología. Entre las intervenciones están la extracción de adenoides, hernias umbilicales e inguinales, Síndrome del túnel carpiano o lipomas de grasa. También se habló de incorporar las figuras de un anestesista, dos enfermeras y un auxiliar.
Petición reiterada
La apertura de la sala de intervenciones ha sido muy bien recibida por el Ayuntamiento de Cambrils. El alcalde, Oliver Klein, apuntaba a este medio que desde que se constituyó el gobierno en septiembre de 2021 se habían hecho varias gestiones para pedir que se ofreciera este servicio tan demandado por la ciudadanía. «Una de las máximas prioridades ha sido la apertura del quirófano del Hospital Lleuger. En este sentido hemos tenido reuniones al más alto nivel y nos hemos cruzado documentos para que quedara constancia de nuestra reclamación. Parece que lo hemos conseguido. A pesar de llegar con 12 años de retraso, valoro muy positivamente esta noticia por el beneficio que supone para todos los cambrilenses», afirma.
Cabe mencionar que desde que se empezó a demorar el servicio todos los gobiernos que han pasado por el Ayuntamiento han pedido en reiteradas ocasiones a la Generalitat que apostara por abrir el quirófano, un tema que también ha aparecido en muchas sesiones plenarias a través de las preguntas de la oposición.
El renovado CAP de Cambrils se inauguró en abril de 2010 a cargo del entonces president de la Generalitat, José Montilla. El quirófano debía estar operativo ese mismo verano pero unos problemas técnicos lo impidieron. En diciembre de 2011 se desencalló el conflicto principal que existía entre el consistorio y el constructor para acabar las obras pendientes y se dio luz verde a su puesta en marcha. No obstante, el tiempo pasaba y se establecían varios calendarios que no se llegaron a cumplir. Cuando más cerca estuvo de abrir fue en 2015 pero, de nuevo, más retrasos y contratiempos dificultaron la puesta en marcha de una sala que ya tenía todo acreditado para poder realizar las operaciones. En 2019, durante una visita de la exconsellera de Salut, Alba Vergés, el gobierno liderado por Camí Mendoza pidió que se hicieran las gestiones correspondientes para activar la sala pero tampoco fue posible.
Hace tres años la Generalitat liquidó su deuda con el consistorio por las obras de ampliación del Hospital Lleuger. Antes de iniciar el proyecto se llegó a un acuerdo para que el gobierno local avanzara el dinero de la construcción, un total de 5,9 millones de euros que la administración catalana se comprometió a pagar una vez se presentaran todas las facturas. Sin embargo, el problema apareció en 2010 cuando se añadió un anexo que señalaba que la Generalitat pagaría también los intereses de demora generados por el impago de la deuda derivada de la obra, por lo que la deuda incrementó y se finiquitó con el ingreso de los 2.065.340,53 euros pendientes.
