La playa Costa Daurada de Roda de Berà tiene desde hace una semana una torre de vigilancia atípica en las playas de Tarragona. Recuerda a primera vista a las casetas de socorristas que se ven en las playas de California. Y salvando las distancias las que salen en la serie y en la película Los vigilantes de la Playa.
Llamada Torre Florida, este punto de vigilancia de más de 16 metros cuadrados de superficie tiene este año un socorrista permanente de 10 a 19 horas y de cara al próximo verano, el número de efectivos de vigilancia aumentará. «Este tipo de torre ofrece una mejor altura para visualizar la zona en 360 grados. El espacio central, cubierto, permite acoger equipos electrónicos con el fin de agilizar la comunicación en caso de incidencias».
La nueva torre de vigilancia está asentada en la playa Costa Daurada, que limita al sur con el puerto deportivo de Roda de Berà y al norte con el litoral de El Vendrell. Adquirida a finales de 2020, los permisos y las tramitaciones burocráticas que se han enviado a la Dirección General de Costas, órgano dependiente del Ministerio de Transición Ecológica, se han demorado hasta este mes de julio, admite el alcalde Pere Virgili.
La empresa torrense Beach Trotters SL ha sido la encargada de colocarla en la arena y dejarla lista para su función. «Es un estilo de caseta que no es muy habitual», reconoce el alcalde, pero que tiene más prestaciones que las habituales sillas con parasol. El presupuesto de la caseta «americana» supera los 17.000 euros y es toda de madera tratada para combatir la situación climática tan cerca del mar.
Desmasificación
La playa Costa Daurada, al igual que la playa Llarga (ambas con bandera azul)son los tramos de litoral de Roda de Berà con mayor espacio para el disfrute de un baño en verano. Por esta razón, el Ayuntamiento de Roda de Berà quiere potenciar los servicios instalados en estas dos playas y seducir a los bañistas de la localidad y a los turistas para que apuesten por estas playas y «desmasifiquen» las pequeñas calas que hay a los pies del Roc de Sant Gaietà.
«Tenemos buenas playas y hay que disfrutarlas, pero debemos intentar que no haya zonas saturadas cuando a pocos cientos de metros tenemos la misma calidad y con las mismas prestaciones», argumenta el alcalde rodense. Los accesos a la playa Costa Daurada no tienen ninguna dificultad: hay aparcamiento gratuito al lado de la vía del tren y el espacio en la arena es suficientemente ancho para poder disfrutar de un día de playa.
Con el fin de «seducir» a los usuarios de playa de Roda de Berà, el Ayuntamiento impulsa en estas dos playas todos los servicios necesarios: desde la torre de vigilancia hasta pasillos o sillas amfibias para personas con discapacidad.
Nueva concesionaria
En la playa Llarga también se ha instalado este mes otratorre de vigilancia (en este caso la silla con cubierta)a la altura del chiringuito Maria Mar. El objetivo es reforzar la visión de los usuarios de esta playa que también cuenta con los servicios necesarios para personas con movilidad reducida. Esta segunda torre de vigilancia en la playa ha sido una aportación extra de la nueva concesionaria, Altesport.
La empresa, con sede social en Salou, ha ganado el concurso que convocó el Ayuntamiento este año desbancando por primera vez la oferta de la Creu Roja, hasta 2020 la que cubría el servicio de vigilancia y Socorrismo.
El acuerdo entre la empresa y el consistorio es para los próximos tres años y los servicios que prestará Altesport se incrementan de cara a 2022, según establece el convenio.
El alcalde, Pere Virgili, explica que «en el contrato ya estipulamos que el número de socorristas sería similar a la temporada pasada (seis personas activas todos los días: un coordinador, cuatro socorristas acuáticos y un patrón de embarcación) marcada por la pandemia, pero para el próximo verano la plantilla activa aumentará confiando en que podamos volver a la normalidad que teníamos antes de la Covid-19».