El Ayuntamiento de Vila-seca instaló a finales de 2022 un punto de recarga para vehículos eléctricos en el aparcamiento del Parc d’Austràlia, en el barrio Miramar. Lo cierto es que nunca llegó a ponerse en funcionamiento y, con el paso del tiempo, el cargador se ha ido degradando y en las últimas semanas ha sido víctima de un robo de los cables que debían surtir de energía a las dos plazas disponibles.
Desde el consistorio explican que de la reparación se hará cargo la nueva empresa que explotará las zonas reguladas de aparcamiento a partir del año que viene, cuya licitación sigue en marcha.
Este cargador fue el tercero público que se colocó en Vila-seca (hay uno en el paseo de La Pineda y otro en el aparcamiento soterrado del CAP) y el objetivo es tener una decena repartidos por el término municipal en los próximos años.