Promover el cambio hacia una movilidad sostenible a raíz de la emergencia climática; adquirir nuevas habilidades y más autonomía escolar; y mejorar la salud y el rendimiento escolar con el desplazamiento en bicicleta hacia el colegio. Son los tres ejes vertebradores del BiciBús, una iniciativa de transporte escolar pionera y a la vez saludable impulsada desde la Associació de Pares i Mares de l’Escola la Bòbila de Cambrils que se ha consolidado plenamente durante este curso 2021-22.
Esta experiencia se lleva a cabo cada viernes, a las 8.45 horas en punto, con una ruta en grupo de aproximadamente 1,5 kilómetros que se inicia frente a la antigua estación de tren, en la Avinguda Vidal i Barraquer, transita por la Avinguda Baix Camp y el Passeig la Salle, atraviesa la rotonda sobre la riera d’Alforja y de allí, por detrás de los bloques La Salle, se dirige hacia la mencionada escuela, ubicada junto a una de las entradas de Cambrils.
«El proyecto empezó a raíz de que Laura Moreno y yo nos encontrábamos con la bici durante el trayecto, le dimos forma y a partir de septiembre lo pusimos en marcha», explica Júlia Molina, la impulsora -llevaba seis años acudiendo en bici a la Bòbila- y quien enseguida encontró el apoyo de su compañera, una apasionada de los pedales y las dos ruedas que en su caso era nueva en el barrio y también en la escuela.
Ahora suelen ser entre cuatro y cinco familias las que toman parte en el BiciBús, lo que equivale a unos quince participantes en total (un par de ellos va en la sillita). Los adultos tutelan a los más jóvenes, entre los que hay alumnos de entre cinco y los 11 años.
Siempre circulan en grupo, con un adulto ‘conductor’ al frente y un ‘revisor’ detrás, ambos con armilla reflectante, y todos los participantes con casco, que es obligatorio.
Esta organización les permite circular con seguridad, aunque también ‘topan’ con algunos problemas que exponen públicamente. «Ir en bici debería ser una cosa muy natural y la sociedad debería ayudar a que fuera así, pero muchas veces nos encontramos con todo lo contrario. Pasamos por aceras amplias, y aún así los viandantes están recelosos; por pasos cebra y los coches no se paran...», advierten. Al tratarse de una hora punta en todas las escuelas de Cambrils la Policía Local no puede darles apoyo en esta iniciativa.
Lamentan, además, que circulando de manera individual y no en grupo algunas veces los automóviles llegan a engancharse prácticamente a las ruedas de las bicicletas cuando a éstas no les queda otro remedio que circular por la calzada.
Júlia y Laura animan «a quienes lo deseen a unirse al grupo». Y también esperan que el Ayuntamiento de Cambrils, que se ha interesado también por el BiciBús a través de las concejalías de Educació y Esports, conozca en breve a fondo el proyecto y pueda ayudar en sus necesidades. Una de ellas sería, por ejemplo, al señalización de la ruta que utilizan para hacerla visible a peatones y conductores.
También creen que su iniciativa podría hacerse extensible a otras escuelas del municipio, con la difusión apropiada y la instalación de aparcabicis.
Cambrils dispone en la actualidad de 23 kilómetros de carril bici -una cifra nada despreciable- fácilmente ampliables con señalización en asfalto y/o aceras sin la necesidad de crear un carril específico con asfaltado rojo.
