Naturgy ha pedido a la justicia el cierre del ciclo combinado de 400 MW que tiene en la central térmica de Plana del Vent, en el término municipal de Vandellòs (Baix Camp). La compañía indica que «está a la espera de resolución por parte del Tribunal Supremo al recurso presentado ante la reiterada falta de respuesta administrativa a la solicitud de cierre solicitada».
La firma añade que «el ciclo de 400 MW propiedad de Naturgy está indisponible desde marzo de 2020 por imposibilidad de funcionamiento». Sucede así «ante la eventualidad de fallo técnico que ponga en riesgo su normal operación».
Esta instalación forma parte de un grupo de 11 ciclos combinados para los que la compañía ha solicitado el derecho de cierre en los últimos años. En concreto, «la petición de derecho de cierre de Plana del Vent se realizó en julio de 2020, tras su declaración de indisponibilidad».
En la solicitud se pedía establecer «un marco económico específico para el Grupo 1 de la central de Plana del Vent que reconociendo y remunerando su servicio de respaldo al sistema eléctrico haga económicamente viable su continuidad».
Las térmicas son clave para el sistema pero su viabilidad económica es objeto de controversia
De hecho, lo que ha pedido Naturgy es la posibilidad de aplicar un cierre temporal, aunque eso no quiere decir que las vaya a clausurar inmediatamente. «Desde el momento en que cada vez empezaron a entrar más renovables en el sistema, que son las que tienen la prioridad, las centrales de ciclo combinado fueron produciendo menos. Fue en ese momento cuando se solicitó el cierre», indica Naturgy. La corporación alegaba que, por el bajo factor de carga, las centrales se habían visto afectadas con rentabilidad económica muy inferior a la necesaria para recuperar la inversión. Además, se solicitaba una indemnización por daños y perjuicios.
Otras diez centrales en España
La situación ahora, sobre todo después de la pandemia, es distinta porque la producción de estas plantas ha aumentado, y la función es clave como respaldo del sistema, más aún con la desaparición del carbón del mix energético.
A la espera de lo que sucede con Plana del Vent, la justicia ha autorizado ya a Naturgy, a través del Supremo, el cierre de diez centrales en España. Es probable que ahora no interese la clausura pero, en todo caso, se trata de una victoria judicial.
Esta situación de encendido y apagado de este tipo de fábricas tiene lugar por su versatilidad. La tecnología permite parar o arrancar sin problemas en un corto espacio de tiempo cuando se necesite más suministro, algo que no sucede con la nuclear.
El otro ciclo en La Plana del Vent está operado por la firma suiza Alpiq. La compañía aclara que, en este caso, «el ciclo está operando con normalidad y aportando la flexibilidad y el respaldo indispensables para el sistema ante la intermitencia de la generación renovable».
Alpiq recalca que «esta contribución de los ciclos a la seguridad del suministro será cada vez más relevante» y, por ese motivo, «considera que los ciclos existentes son una tecnología esencial para conseguir esa integración de generación renovable en el sistema, garantizando al mismo tiempo la seguridad del suministro».
Alpiq se asegura «de que Plana del Vent esté en condiciones óptimas para desempeñar este papel a través de una inversión continua en el activo».
