El pequeño Alan ha empeorado en las últimas horas en el hospital Joan XXIII de Tarragona, han confirmado fuentes conocedoras del caso. Estaría en muerte cerebral.
Las heridas sufridas en la cabeza, tras caerse desde el balcón de un tercer piso del número 30 de la calle Sant Jordi, vivienda de su familia, son irreversibles.
El pequeño se precipitó desde una altura de unos 10-12 metros el pasado miércoles por la tarde. El niño cayó a la calle de cabeza y las heridas del impacto han terminado con su corta vida.
La investigación del caso, a manos de Mossos d’Esquadra, parte de un accidente y de momento no hay indicios que señalen otras alternativas.
El pequeño fue atendido por el SEM y trasladado de urgencia hasta el hospital de referencia de Tarragona. Entró en quirófano y fue trasladado a la UCI pediátrica una vez salió de la sala de operaciones. Su estado de salud se diagnosticó como crítico desde el primer momento. Su estado de salud habría empeorado en las últimas horas.
La noticia ha consternado a la ciudad donde vivía con su familia. La escuela La Canaleta, donde el menor de 4 años iba a clase, el jueves tuvo el apoyo de psicólogos para intentar explicar a los compañeros la caída desde el balcón de su piso. E incluso un acto que estaba programado el sábado, se había cancelado al conocer el accidente.
