Cuatro meses después de que el pasado 1 de diciembre, a los empleados de Bonmont Terres Noves se les cortara la luz, a día de hoy todavía siguen yendo a sus puestos de trabajo en las mismas condiciones. Han pasado ya miuchas semanas desde ese día, en que debido a varios impagos por parte de la empresa, Endesa terminó por dejarla sin suministro, una situación que terminó concluyendo varios días después, cuando un técnico de la compañía se llevó el contador.
Esta es la situación que expuso al Diari un ahora ex empleado de Bonmont Terres Noves, cuya identidad desea mantener en el anonimato. Él es uno de los 29 trabajadores afectados por una situación que, en agosto, hará un año que arrastran. Fue entonces cuando la empresa comenzó a pagarles sólo el 30% de la nómina porque, según ya explicaron los afectados a este medio de comunicación, se les aseguró que el día 2 de mayo del 2022, se formalizaría la compra venta del complejo, algo que nunca llegó a suceder.
Ante esta situación, en septiembre los empleados interpusieron demandas judiciales en los Juzgados de Reus, pero, según el ex empleado, «nos han dado las fechas de juicio para dentro de un año. Es una barbaridad», lamenta. Aun así, a finales de este mes de abril «algunos de nosotros debemos personarnos en el juzgado para que se nos anuncien las medidas cautelares. Es todo», concluye.
Algunos se van
Lo insostenible de la situación ha hecho que, desde el pasado mes de enero, cuando el Diari contactó con los trabajadores, cuatro hayan dejado el trabajo, con lo que a día de hoy en Bonmont Terres Noves quedan 25 personas a su cargo. De los cuatro que se fueron, «dos hemos encontrado otro empleo por nuestra cuenta» y los otros dos «se han acogido a la bolsa de trabajo que nos ofreció directamente el Ayuntamiento». De hecho, este ex trabajador remarca que «incluso el Consistorio nos dio prioridad a la hora de entrar en la bolsa».
Finalmente, el ex empleado asegura que la familia Lavanchi, propietaria del 49% de la empresa, «también se ha puesto en contacto con los trabajadores que todavía quedan y les ha planteado varias opciones con el fin de poder mejorar su situación». Recordemos que, según aseguró en su día el abogado de la familia al Diari, sus clientes «son plenamente conscientes de lo que está sucediendo. Emocionalmente, la situación que se está viviendo en el complejo les afecta mucho porque ellos fueron quiénes lo impulsaron» y «están muy apenados de ver lo que está sucediendo en el complejo por el que tanto apostaron».
A la venta por más de 20 millones
El Club de Golf Bonmont Terres Noves lleva meses a la espera de cambiar de propietarios. El complejo debía ser adquirido por un fondo de inversión, por entre 20 y 25 millones de euros, incluyendo el campo de golf e instalaciones anexas, el hotel de cinco estrellas superior (pendiente de estrenar), y una gran extensión de terrenos sin urbanizar. En junio de 2022 había dos fondos interesados en la compra venta, uno de ellos los descendientes del empresario suizo Henri-Ferdinand Lavanchy.
Sin embargo, a día de hoy, y a pesar de hacer cerca de un año del día que se informó a los trabajadores de la fecha del cierre del acuerdo, éste todavía no ha trascendido. La operación requiere de unos trámites complejos debido a cómo está hecho el reparto de los bienes inmuebles y valores accionariales entre las sociedades propietarias.
Los juicios por las demandas interpuestas no se celebrarán hasta dentro de un año
l El hotel de lujo de la cadena Marriot debía abrirse en 2019, pero la pandemia y unas inversiones exigidas por los estadounidenses acabaron paralizándolo. Hoy sigue con las puertas cerradas a la espera de una nueva inversión de 1 M€ que debería asumir la sociedad propietaria del 51% de las acciones.
