Cambrils se ha levantado esta mañana con la mirada puesta en el cielo tras la última alerta por lluvia que desde hace unos días acompaña todos los actos de la Mare de Déu del Camí.
A pesar que algunas gotas de agua han acompañado el Seguici de la mañana, desde la plaza del Setge hasta la Ermita del Camí para la misa y los actos más solemnes y tradicionales, a media mañana el sol ha vuelto a lucir y hacer brillar todo el trabajo que las Entitats hacen para que la fiesta de la patrona local sea todo un éxito. Lo han conseguido.
El sábado por la noche unas 2.000 personas participaron en la 7ª Pujada de la Galera y hoy por la tarde, la plaza de la Vila se ha vuelto a convertir el centro neurálgico de la localidad con los bailes de lucimiento de todos los elementos festivos de Cambrils.
Entre las novedades de la jornada hoy, destacar la Pujada a Missa Primera -organizada por los mariners i marineres- que recupera una antigua tradición de ir a misa a primera hora de la mañana antes de ir a trabajar. Una treintena de vecinos de la localidad, entre ellos el periodista y colaborador del Diari Josep Capella, han participado de la iniciativa.
Por otro lado, la tarde de hoy domingo ha vuelto a acoger una triple representación del ball parlat de Vileros i Mariners en la Torre del Llimó con un notable éxito de participación en cada uno de los pases.
La Festa Major de Cambrils encarrilará la recta final el martes por la noche con la actuación de la formación de Valls Figa Flawas y otros grupos locales y, justo después, los actos solemnes de la Diada en el Parc del Pescador de la localidad.