La nueva estación de Salou, que se halla en fase de construcción, ha encontrado un contratiempo que, sin embargo, no parece que vaya a retrasar la marcha de las obras. El Diari ha podido saber que fue el pasado verano cuando, durante las labores de desbroce que se habían iniciado en abril, se encontraron restos arqueológicos que están siendo examinados por técnicos del área de Patrimoni Arqueològic i Paleontològic de la Generalitat.
Estos silos, de los cuales los trabajadores de Adif (Administrador de Infraestructuras Ferroviarias) han abierto varias catas, se encuentran en el vial que debería construirse en la zona de Emprius -donde se halla la estación- que unirá la propia infraestructura ferroviaria y el centro de la localidad. Por tanto, inicialmente, no afectarían tanto a lo que es la propia estación de Salou/PortAventura pero sí a sus inmediaciones y alrededores. Lo cual no supondría la paralización de los actuales trabajos de cimentación y construcción de la propia estación, pero sí todo lo referente a carretera que dará acceso a la misma y sobre la que se moverán coches y autobuses. «La voz de aviso la dio un arqueólogo nuestro tras el inicio de las labores de desbroce», reconocen fuentes de Adif.
Los silos se descubrieron a principios del verano pasado en esas labores de limpieza de hierbas y matorrales y desescombro de los terrenos afectados. Posteriormente, en octubre, se notificaron a Patrimoni Arqueològic. «Sabemos que son restos arqueológicos pero ahora está en manos de los técnicos de la Generalitat. Ellos deberán ser quienes especifiquen de qué se trata exactamente y sobre a qué época pertenecen», señalan las mimas fuentes de Adif. De esta manera, la situación arqueológica ha pasado ahora a menos de la administración autonómica y será un informe arqueológico el que desvelará la importancia del hallazgo.
Cabe apuntar que fue el pasado 16 de enero cuando se iniciaron los trabajos de arqueología en el vial de entrada a la estación. Actualmente, hay un silo totalmente excavado mientras que otros están en fase de excavación.
Desconocimiento municipal
Ayer fuentes del Ayuntamiento de Salou aseguraron desconocer por completo toda esta situación. Tanto el equipo de gobierno como la oposición señalaron que no habían tenido noticias al respecto. El propio alcalde salouense, Pere Granados, aseguró que «no sabíamos de ello pero, en cualquier caso, estoy seguro de que el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana se encargará de realizar las oportunas modificaciones para solventar el tema. No afecta directamente a lo que es la propia estación, pero sí a sus inmediaciones y accesos».
Situación actual
Mientras, en la estación de Salou/PortAventura ya se han realizado los cimientos y fue el pasado 22 de diciembre cuando se hormigonó la losa sobre la que se construirá el edificio de pasajeros. Ahora mismo se está trabajando para hormigonar los pilares circulares de la estructura.
También se ha colocado el armado en la losa inferior del edificio técnico, estando prácticamente finalizado a falta solo de algunos detalles. También se está encofrando el perímetro de la losa para su posterior hormigonado.
Las fuentes de Adif aseguran además que «se han realizado los primeros trabajos en la zona donde irá el nuevo andén, con la colocación del cableado en una canaleta de nueva construcción y la base del muro que constituirá el nuevo andén 1 y a continuación, se colocará un tubo para el drenaje de la plataforma ferroviaria».
En el muro de apoyo del vallado de cerramiento del vial de entrada a la estación y del aparcamiento, la cimentación está toda hormigonada, a falta del último tramo junto a los silos de arqueología. En total, se han hormigonado 24 metros del alzado del muro.
El proyecto
Entre las actuaciones comprendidas en este proyecto, incluido en el Plan de Rodalies, destacan el nuevo edificio de viajeros, en el que se creará un vestíbulo principal con zona de espera, un área de explotación pública que contará con zona de venta de billetes y atención al cliente para distintos operadores, un espacio de explotación privada con dependencias internas y cuartos de instalaciones, un local comercial y aseos públicos.
Respecto a los andenes, se remodelará el actual (de 240 metros de longitud y 5 metros de anchura), y se construirá uno nuevo de similares dimensiones junto a la vía principal.
Ambos andenes estarán unidos en su cabecera mediante una plataforma de 9,5 m de anchura que los conectará con el edificio de la estación. También contarán con una marquesina de 200 metros de longitud aproximadamente, así como en la cabecera de conexión con el edificio.
Al ser una estación terminal, se ejecutarán toperas al final del andén existente en la vía 2 y la vía general de la vía 1 y se adecuarán las instalaciones ferroviarias (electrificación, vías, señalización y comunicaciones) a la nueva configuración de la estación.
Por otro lado, se proyecta un aparcamiento en superficie de 200 plazas para automóviles, de las que 10 estarán reservadas para personas de movilidad reducida, y espacio para motocicletas y bicicletas. Asimismo, se incluyen áreas para subida y bajada de viajeros, y estacionamiento de taxis. Tanto el aparcamiento como la parada de taxis y el espacio para subida y bajada de viajeros contarán con marquesinas.
Además, se urbanizarán los accesos, con la definición de los viales necesarios para organizar los diferentes tráficos (vehículos particulares, aparcamiento, kiss&ride, taxis, autobuses y tránsitos peatonales). Precisamente, en esos accesos es donde se han hallado los restos arqueológicos. También se instalarán nuevos cerramientos de seguridad en todo el ámbito de la nueva estación.
Está previsto que la obra finalice en la primavera de 2024.
