El sector turístico de la Costa Daurada insiste en una de sus reivindicaciones históricas. Reclama que se traslade cuanto antes la monoboya que explota Repsol, ubicada a tres quilómetros de la playa de La Pineda, dentro del Port de Tarragona por seguridad. Teme que algún día pudiera producirse una fuga de crudo incontrolable y afectara a las playas de la demarcación.
«Es una vergüenza y es una irresponsabilidad tremenda por parte de Repsol (…) No tiene que pasar nada, pero el día que pase no tendremos tiempo de mirar hacia atrás y ver lo que se hubiera podido hacer», asegura Eduard Farriol, el presidente de la Federació Empresarial d’Hostaleria de Tarragona (FEHT).
La monoboya que explota Repsol es una de las instalaciones más delicadas del Port de Tarragona. La compañía utiliza esta infraestructura para el vaciado de buques petroleros. Esta pieza amarilla dispone de tres mangueras flotantes que se conectan con los grandes petroleros para descargar el crudo, que a través de una tubería submarina se deposita en el pantalán de Repsol. Son los buques más grandes, conocidos como superpetroleros, los que descargan en la monoboya. Los que tienen menos de 200 metros lo hacen en el pantalán de Repsol.
Farriol considera que es una actuación necesaria no solo para el sector turístico, para quienes una hipotética fuga sería «un desastre», sino «por la población en general, por los pescadores y al fin y al cabo por el medio ambiente».
El traslado de esta instalación dentro del Port como un punto de atraque permitiría controlar una fuga dentro del ámbito portuario con unas barreras de contención.
Tanto el Port de Tarragona como Repsol hace tiempo que adquirieron el compromiso de trasladar la monoboya. Pero para llevar a cabo esta actuación es necesaria la aprobación del Pla Director del Port. Este instrumento de planificación recoge las infraestructuras portuarias a desarrollar hasta el año 2035.
Desde el Port aseguran que se está cumpliendo con el calendario previsto de tramitación de este nuevo Pla Director. «Dado que las acciones del Plan Director son por un periodo amplio de tiempo, las infraestructuras que se recogen son de mucha relevancia y por tanto, de un trabajo técnico importante», aseguran fuentes del Port. En este sentido, explican que es un trabajo que se ha avanzado durante este último año «de acuerdo a la planificación temporal que ya habíamos anunciado en su momento».
Sin un calendario concreto
La entidad portuaria espera poder acabar en breve esta fase de los trabajos para poder enviarla al Ministerio de Medio Ambiente para su resolución definitiva y entonces ya se entraría en la fase final de tramitación. A partir de ese momento se podrán empezar a ejecutar las obras previstas, y presupuestadas, como la ampliación del contradique de Els Prats.
Por el momento, el Port no ha querido entrar en detalles de calendario ni fechas concretas de cuándo se podría hacer efectivo el traslado de la monoboya.
Por otra parte, el presidente de la FEHT no entiende que «los políticos no digan nada» y lamenta que «no les importe» una cuestión como ésta. «Me sorprende que una multinacional como Repsol sea tan irresponsable con la provincia de Tarragona. Me deja fuera de juego», concluye Farriol.
Desde Repsol han insistido en distintas ocasiones en que se trata de una instalación «fiable, moderna y segura», aunque entienden la sensibilidad que hay alrededor de esta infraestructura. Y recuerdan que «nunca» han puesto ninguna traba para que se realizara el traslado.