El Auca Taverna de Torredembarra, situada en el número 4 de la Plaça de la Vila, cerró hace pocas semanas. El titular de la actividad ha sido desde su apertura, en mayo de 2012, el concejal de Acció Social Lluís Suñé, quien solicitó la licencia correspondiente al Ayuntamiento. Firmó un contrato de arrendamiento por cinco años con el propietario del inmueble y éste vencía esta próxima primavera. Sin embargo, decidió bajar la persiana el 30 de noviembre por un problema de salud. Debe operarse de una rodilla.
El negocio podría encubrir un fraude eléctrico. Durante cuatro años habría estado conectado irregularmente a la corriente eléctrica, según ha podido saber por varias fuentes el Diari.
Se da la circunstancia que Suñé es concejal de Acció Social y en estos momentos lleva las negociaciones con la compañía Endesa sobre los cortes de suministro relacionados con la pobreza energética de la localidad.
El fraude eléctrico a día de hoy no habría sido denunciado todavía a los Mossos d’Esquadra. El gran volumen de expedientes que tiene encima de la mesa Endesa imposibilita que todos sean denunciados policialmente. Y el de Auca Taverna es uno de los que aún no estaría.
Lluís Suñé ha declinado hablar de sus negocios con el argumento de que es parte de su vida privada. No ha querido entrar a valorar los datos de que dispone el Diari y se ha remitido únicamente a confirmar que deja el negocio porque por motivos de salud no puede seguir al frente. En ningún momento ha negado los hechos.
Según ha sabido el Diari, el local recibió una inspección de la compañía eléctrica a principios de octubre de 2012, cuando se detectó que la energía consumida en el restaurante y reflejada en el contador del local no se abonaba. Se tramitó entonces un expediente por morosidad.
El propietario del local y del piso habría recibido la notificación de la deuda económica de miles de euros, pero se habría firmado un documento entre las partes (propietario del local, titular de la licencia de bar y Endesa) para que el dinero pendiente del consumo eléctrico de los primeros meses de Auca Taverna recayera en el titular de la actividad, Lluís Suñé, y no en el propietario del inmueble de la Plaça de la Vila, que ha declinado hablar con el Diari de este asunto.
La morosidad detectada en octubre de 2012 provocó el corte de suministro por impago, aunque el negocio de restauración seguía funcionando todas las tardes y con clientela. El formato de negocio se inspiraba en el modelo de las herriko tabernas vascas combinando buena comida a base de pinchos y actividades socioculturales y políticvas de carácter local y nacional. De hecho, las críticas de la página Facebook hablan maravillas de la cocina y muchos torrenses confirman que el negocio iba viento en popa.
Respecto a los actos sociales que se convocaban, hay que tener en cuenta que Lluís Suñé es portavoz y líder de la formación Alternativa Baix Gaià (ABG), un partido político con ideales ecosocialistas y proindependentistas. Muchos de los actos que allí se han celebrado han tenido un carácter marcadamente político. Es concejal de Torredembarra desde 2003 y en esta legislatura osententa la cartera de Acció Social i Cooperación con la tercera tenencia de Alcaldía.
La historia de la presunta morosidad entre Lluís Suñé y Endesa no se destapa hasta verano de 2016, cuando técnicos de la compañía eléctrica descubren que el local tenía suministro a pesar de tener el contador anulado desde 2012. Se habría conectado de forma ilegal directamente a la red.
Según fuentes consultadas por el Diari, a finales de agosto la compañía cortó nuevamente el suministro fraudulento de electricidad de Auca Taverna y abrió expediente por ello. No se descarta que hubiera habido visitas durante este periodo, pero los técnicos se encontrarían en local cerrado y emplazaban para otro día la visita.
El fraude eléctrico que se habría cometido en este negocio de la Plaça de la Vila es uno de los 5.764 que se han abierto en este pasado ejercicio en la provincia de Tarragona. Fuentes de la compañía no han confirmado que este negocio esté en un expediente de fraude y recuerdan que no se puede hablar de casos particulares, puesto que están bajo la ley de protección de datos. Pero sí hubo corte de suministro deluz, tal y como han informado al Diari fuentes conocedoras del caso y existe el documento privado de la compañía explicando la actuación de agosto y el motivo.
Aunque hubo un segundo corte, el de 2012 es por morosidad y cierre de contador, y el de 2016 es por fraude (al no tener un contador dado de alta existe este delito de defraudación), el local ha seguido abierto y mostrando sus exquisiteces culinarias hasta finales de noviembre, cuando Suñé acordó con el propietario del edificio rescindir el contrato. Desde entonces, una reja metálica y un cartel de se alquila sellan la historia del Auca Taverna en la Plaça de la Vila.