La desaparición de las antiguas vías del tren de la costa supone la eliminación de una barrera histórica para muchas localidades de nuestro litoral y también una oportunidad para explorar nuevas alternativas de movilidad. En Cambrils, a la anunciada llegada del tranvía, el desmantelamiento de la vía también le puede ayudar a mejorar las conexiones por carretera. Eso es lo que pretende el nuevo gobierno municipal con uno de los proyectos bandera para este mandato, los nuevos accesos perpendiculares a la ciudad.
Se trata de abrir dos nuevas vías de comunicación en los dos extremos del núcleo urbano de Cambrils. Una que enlace desde la carretera de Montbrió (T-312) con la zona de Horta de Santa Maria y otra que abra una nueva carretera hacia la zona de playa desde la rotonda elevada de la A-7, en paralelo a la riera de Maspujols. De esta forma, el consistorio pretende agilizar los accesos y, a la vez, aligerar el tráfico que se genera alrededor de la riera d’Alforja.
En el primer caso, la actuación depende del Ayuntamiento y el gobierno ya ha encargado un proyecto a los servicios técnicos municipales. En el segundo, implica una ampliación de la carretera de Misericòrdia y es la Generalitat quien debe hacerse cargo.
«Supone una nueva realidad para la movilidad de Cambrils», defiende el alcalde, Alfredo Clúa, que dice que «ahora mismo, vengas de donde vengas, cuando coges una de las entradas naturales de Cambrils, como son las carreteras de Reus o de Montbrió, siempre vas a parar a la riera». «Este proyecto supone un cambio disruptivo de movilidad. Accesos más fáciles y rápidos desde Ponent y desde Llevant y menos tráfico alrededor de nuestra riera», argumenta Clúa.
Esta misma semana, el alcalde ha mantenido una reunión con los máximos responsables de los Serveis Territorials d’Urbanisme de cara a reivindicar la prolongación de la carretera de Misericòrdia desde la rotonda que enlaza con la A-7 hasta el Vial de Cavet. Una nueva carretera cuyo trazado se acabará de definir para incluirla como eje de desarrollo dentro del nuevo Pla Director Urbanístic del Camp de Tarragona que está elaborando la Generalitat.
Asimismo, en este punto se produce actualmente un cruce peligroso para los coches que acceden desde la antigua N-340 al camino junto a la riera que lleva al Molí de la Torre. Un tramo peligroso que el Ayuntamiento también quiere eliminar con esta actuación.
En el caso del acceso desde la carretera de Montbrió, el proyecto que se ha encargado debe definir un tramo de unos 200 metros que salga desde la rotonda del Rotary hasta la calle Mestral. De esta forma, se daría continuidad a esta calle históricamente cortada por las vías del tren y agilizaría las entradas tanto al barrio de La Llosa como a la zona de playas y el puerto a través de la avenida Horta de Santa Maria. En este ámbito, además, el consistorio pretende construir un nuevo aparcamiento disuasorio.