El Ayuntamiento de Cambrils, durante este pasado mes de junio, ha puesto en marcha varias medidas para impedir o dificultar el estacionamiento de autocaravanas en las zonas más concurridas de Ponent y Llevant. Los resultados de estas acciones ya se notan en Ponent, concretamente en la calle Estel, que es donde más se concentraban este tipo de vehículos.
En esta zona ya se ha reordenado el tráfico y se ha reducido la anchura de las plazas de aparcamiento, de forma que puede aparcar un turismo o una furgoneta pequeña, pero no una autocaravana, porque sobresale del límite marcado y, por tanto, la Policía Local podría sancionarla.
En la zona de Llevant, en la zona de L’Esquirol, se sustituirán algunas zonas naranjas por azules con la finalidad de favorecer la rotación de vehículos y evitar que estén estacionados de forma fija durante largos periodos vacacionales.
Por el momento ya se ha modificado la ordenanza reguladora de la tasa de estacionamiento de vehículos en las vías públicas y en los próximos días se pintarán las líneas en el suelo.
Esta medida encarece el aparcamiento y por tanto, dificulta que las autocaravanas aparquen durante varios días sin favorecer la rotación de vehículos en una zona altamente concurrida y más en los meses de verano donde la actividad es más alta.
Regulación necesaria
El concejal de Movilidad, Enrique Arce, ha afirmado que las autocaravanas «son bienvenidas a Cambrils, pero es necesaria una regulación para estos vehículos, que causan muchas molestias al vecindario por los ruidos, el tamaño, la ocupación excesiva del espacio público o el impacto visual en primera línea de playa».
Por su lado, el concejal de Urbanismo, Enric Daza, ha explicado que el objetivo de esta reorganización es que las autocaravanas salgan de los puntos más concurridos como el Ardiaca, la playa del Cavet o la zona de la Torre de L’Esquirol, y utilicen los aparcamientos disuasivos que están repartidos por todo el término municipal.
Antes de tomar estas medidas, el Ayuntamiento ha esperado a tener los aparcamientos disuasivos que acojan estos vehículos.
Con esta medida, Cambrils sigue el camino iniciado por Vila-seca –en la zona de La Pineda– que desde el pasado mes de febrero inició un proceso de participación pública para ampliar la zona azul en primera línea e instaurar la zona naranja en varias calles del núcleo de la localidad. En ambos casos, el objetivo es aumentar la rotación de vehículos y evitar que estén aparcados durante días en épocas de más actividad turística.