El Ayuntamiento de Girona ha convocado una junta local de seguridad que se celebrará esta misma semana a raíz del doble crimen en el barrio de la Font de la Pólvora la noche de Sant Joan.
Además, el consistorio ha decretado dos días de luto oficial en la ciudad y ha vuelto a condenar los hechos que «no deben volver a repetirse». El alcalde, Lluc Salellas, ha pedido «serenidad y calma» y reconoce que «hay que seguir trabajando en el barrio para ayudar a que no se vuelva a producir nunca más». «Esto no se soluciona solo con discursos, sino que se hace con acciones concretas y por eso ya hemos convocado reuniones para empezar a hacerlo», ha señalado Salellas, quien ha confirmado que una de las víctimas es una trabajadora municipal que trabaja como cocinera en el centro de acogida La Sopa.
El doble crimen de la noche de Sant Joan en el barrio de Font de la Pólvora ha causado consternación entre los vecinos de Girona. Por ello, el alcalde, Lluc Salellas, ha destacado que se trataba de un hecho «muy poco habitual» y ha pedido «calma» a los ciudadanos, a la vez que ha reafirmado la condena «firme» contra los hechos que ocurrieron alrededor de las once menos cuarto de la noche, a raíz de una discusión entre dos mujeres.
Salellas ha dejado claro que «seguirán trabajando como se ha estado haciendo desde hace unos meses» para mejorar la seguridad «más allá del punto de vista policial».
El alcalde ha firmado este mismo lunes 24 de junio por la mañana la orden para convocar una junta local de seguridad que permita empezar a poner en marcha «con todos los actores implicados». El objetivo es evitar que se vuelvan a producir incidentes de este tipo. Salellas ha explicado que hoy hay una «calma tensa» en Font de la Pólvora, donde hay presencia «permanente» de los Mossos para evitar nuevos incidentes.
Cabe decir que este lunes varios amigos y familiares de las dos personas fallecidas han destrozado la casa donde vive el sospechoso del doble crimen, quien la policía busca desde las 23 horas del domingo, ya que logró huir después de tirotear a cuatro personas y atropellar a una de las víctimas mortales.
«Ahora mismo el barrio está en calma, aunque deben asimilar unos hechos que son muy difíciles de asimilar. Ahora lo que debemos hacer es garantizar que los Mossos están presentes en el barrio, pero no tememos que puedan ocurrir más incidentes», señala el alcalde.
