L’Arboç, Sant Jaume dels Domenys, Llorenç del Penedès y Banyeres ya sufren un mes de huelga de recogida de basuras y la situación no parece tener visos de solución rápida.
Las posturas de la empresa y de los trabajadores están enconadas mientras los vecinos y los ayuntamientos temen riesgos de insalubridad por la acumulación de residuos y basuras.
La situación de residuos acumulados en las calles no sólo genera la aparición de ratas y una cada vez mayor presencia de jabalíes un busca de comida. También han podido verse a zorros rebuscando junto a contenedores y papeleras.
Un peligro
La presencia de esos animales preocupa a los vecinos, pero son una consecuencia de las basuras acumuladas en las calles y las áreas de emergencia. Además temen que jabalíes, zorros y ratas sean un peligro para las personas.
Los municipios plantearon sancionar a la empresa ya que consideran que no se están cumpliendo los servicios mínimos, algo que los trabajadores niegan. En todo caso no hay acercamiento entre las posturas.
Mientras en los municipios hay preocupación porque no se intuye una solución, los vecinos van teniendo menos aguante con bolsas de basura y residuos de tipo en sus casas y que ya comienzan a verse no sólo en las calles sino en parajes naturales como la riera de Llorenç que además recientemente ha sido limpiada de especies invasoras.
Los alcaldes consideran que decretarse un riesgo sanitario podrían activarse sistemas de emergencia para retirar la basura acumulada. Los municipios ni pueden activarlas porque vulnerarían el derecho de huelga.
Pero de momento parece que la situación se alargará.