Impulsar la resiliencia hídrica, garantizar la sostenibilidad de los ecosistemas y acelerar la digitalización del ciclo del agua son los principales objetivos del proyecto estratégico A-MEDI (Aigua Mediterrània Digital), desarrollado por Agbar y que ha sido seleccionado en la segunda convocatoria del Proyecto Estratégico para la Recuperación y Transformación Económica (PERTE) de digitalización del ciclo del agua.
En concreto, el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico ha otorgado una ayuda de más de 6 millones de euros para financiar el proyecto, que se llevará a cabo en los municipios de Valls (Alt Camp), Sant Pere de Ribes, Sitges, Canyelles y Olivella (Garraf), Castellet i la Gornal, Olesa de Bonesvalls y Sant Cugat Sesgarrigues (Alt Penedès).
A-MEDI plantea más de un centenar de actuaciones que aceleran la digitalización de la actividad del ciclo urbano del agua en estos municipios, desde la captación, el transporte y la distribución de agua potable, hasta el saneamiento y la regeneración. La implantación de nuevas tecnologías digitales permitirá una gestión más eficiente del recurso y una mejora de la transparencia y de la gobernanza del servicio de aguas, además de proteger las masas de agua y los entornos naturales de la zona y garantizar la resiliencia de los municipios, un aspecto crucial en el actual contexto de escasez hídrica y de cambio climático, que se ve agravado por la estacionalidad que padecen estas poblaciones. Todo esto sin olvidar el eje social: de hecho, el proyecto prevé generar 11 nuevos puestos de trabajo y también buscará establecer alianzas con el territorio.
Transformación ecológica, digital y social
A-MEDI contempla tres tipos de actuaciones para transformar la gestión del ciclo urbano del agua en los ocho municipios. Por un lado, el proyecto incluye varios planes y estudios, acciones destinadas a establecer los ejes estratégicos para mejorar las captaciones, el saneamiento, la gestión del agua e impulsar la regeneración, entre otros, así como minimizar el impacto del cambio climático sobre los recursos.
En este sentido, está prevista la redacción de planes de gestión de riesgos por sequía, de vigilancia sanitaria, de calidad del agua y de protección en caso de inundaciones, así como planes directores de abastecimiento de agua, tanto en alta como en baja, y estudios hidrogeológicos para identificar posibles nuevos recursos hídricos locales y establecer una gestión sostenible de los mismos.
Cabe destacar los planes de agua regenerada en los municipios donde Agbar gestiona el alcantarillado—Sant Pere de Ribes, Sitges, Valls y Canyelles—que prevén un diagnóstico de la capacidad de regeneración de los municipios, así como propuestas concretas de actuación.
El segundo bloque del proyecto incluye acciones orientadas a mejorar la eficiencia, la digitalización y el acceso a la información. Se pretende digitalizar la captación, el abastecimiento, el consumo, el alcantarillado y el saneamiento del agua mediante la instalación de instrumentación que permitirá obtener, en tiempo real, información sobre el estado de las redes y la calidad del recurso, así como adelantarse y evitar posibles episodios de vertidos contaminantes en el medio.
Además, se avanzará en la implantación de la telemedición de contadores de agua, lo que permitirá un control mucho más exhaustivo del consumo de agua, tanto por parte del propio usuario como por parte de la administración y la operadora del servicio.
La sensorización, la sectorización y la implantación de nuevos programas de gestión también incidirán en la mejora del Rendimiento Técnico Hidráulico (RTH) de las redes de abastecimiento y en la reducción del Agua No Registrada (ANR). De hecho, A-MEDI prevé una mejora de más de 10 puntos en el RTH medio de los municipios del proyecto, situándose por encima del 74%.
Este bloque también incluye acciones para impulsar la eficiencia energética y la descarbonización de la actividad del ciclo del agua en los ocho municipios, como la instalación de más de 600 kWp en cubiertas solares. En conjunto, A-MEDI prevé una reducción del 23% en las necesidades energéticas anuales (alrededor de 1 GWh), el equivalente al consumo de energía de 340 hogares.
Finalmente, el tercer bloque de A-MEDI incluye las actuaciones relacionadas con la gestión de la información y el cumplimiento de los objetivos ambientales: la implantación de nuevas plataformas y herramientas de gestión digital y software específico para mejorar la gobernanza del ciclo integral del agua, impulsar el control de la calidad e incidir en la securización de las instalaciones que intervienen en el abastecimiento y el saneamiento.
Todas las actuaciones planteadas en el proyecto A-MEDI están valoradas en más de 7 millones de euros, de los cuales más de 6 millones de euros serán financiados por los fondos europeos Next Generation. Se prevé finalizar la implantación de todas las acciones del proyecto el 30 de junio de 2026.