Tras la larga y espectacular rúa de la artesanía del sábado, las mejores comparsas repiten y brillan en la tarde del domingo de Carnaval. La Rúa de Lluïment, como bien indica su nombre, ofrece una brillante actuación de los quince primeros clasificados en el concurso del año anterior. Estas se suman, como no, a la comitiva de Carnestoltes y su Concubina (Disc45 y Colours Fantasy).
Por fortuna, la lluvia nos da tregua esta vez. No hay ningún impedimento para que todo salga rodado y las calles del centro queden invadidas por la música, plumas y bailes. Pese a no haber tanto ambiente como sábado, son muchos los que se acercan para disfrutar de la segunda y última rúa. Aerodance y su circo de los horrores son los encargados de encabezar la tarde. Los payasos macabros (y las palomitas arrojadas) causan una buena primera impresión entre el público. El ambiente festivo está presente también entre los comparseros, se nota el disfrute de bailar sin la presión de concursar. Más sonrisas e interacción con el público.
Esta columna no da para detallar cada una de las diecisiete presentaciones, pero se puede asegurar que el nivel es alto, mucho. La inspiración de la gran pantalla: Aladdin, Los Picapiedra, Alicia en el País de las Maravillas y Shrek. Tampoco falta cada año las temáticas tribales. Hoy vemos a los inuit, amazonas y masái. Los inuit de Urban Style, de hecho, parecen ser de los favoritos del público. La apuesta por los grandes abrigos de pelo, trineos y renos, con una trabajada coreografía es todo un éxito. Otro favorito en la calle es el viaje a Versalles que ha ofrecido Sinhus: un jardín de flores, una gran fuente, elegantes vestidos y tocados, mariposas doradas.
Algunos puntúan por su cuenta y eligen sus ganadores. Pero no será hasta la noche de martes que conoceremos los verdaderos triunfadores.