Bajo el grito «És qüestió de vida, el territori crida!» más de un centenar de personas se han concentrado esta mañana en las escaleras de la Catedral de Tarragona para exigir al próximo Govern de la Generalitat una regulación urgente de la contaminación provocada por la actividad petroquímica.
Piden la declaración de una Zona Cero que permitan regular los picos de contaminación de forma «correcta», es decir, que en las mediciones no tan solo se tengan en cuenta los promedios sino que se controlen los episodios de contaminación, especialmente en cuanto a la emisión de componentes como el óxido de etileno, el benzeno o el 1.3 butadieno.
El acto, liderado por la plataforma Cel Net, ha contado con el apoyo de 115 entidades del mundo de la cultura, el sindicalismo, la cultura popular y el movimiento escolta, entre otros colectivos, que han mostrado su apoyo al manifiesto leído por el actor Oriol Grau.
En este se ha puesto el acento en que las demandas son fruto del trabajo conjunto de la plataforma con la Universitat Politècnica de Catalunya, la Universitat de Barcelona y la Universitat Rovira i Virgili, que han impulsado diversos estudios que «demuestran que el Camp de Tarragona se encuentra en una situación de urgencia».
«Clamamos para pedir una cosa tan sencilla como que queremos que nuestra casa deje de ser la zona cero de la desprotección y que la Generalitat ponga fin al olvido de los últimos cincuenta años», decía.
Al respecto, han interpelado de forma directa a los partidos que se presentan a las próximas elecciones del 12 de mayo para que esta regulación sea «el proyecto para el Camp de Tarragona de la próxima legislatura». Y es que, según ha puesto de manifiesto el portavoz de Cel Net, Adrià Pallejà, «es cuestión de voluntad política». «Tenemos las herramientas y la Generalitat tiene la potestad para regularlo», ha apuntado.
Entre los participantes estaban los líderes que encabezan las listas de ECP y la CUP en la demarcación de Tarragona.
