El Pla especial d’actuació en situació d’alerta i eventual sequera (PES) es un documento que se aprobó en enero del año 2020 por parte de la Generalitat de Catalunya. En dicho texto, se especificaba que todos los municipios que tuvieran más de 20.000 habitantes y que formaran parte de la Agència Catalana de l’Aigua (ACA) deberían disponer de un plan de emergencia ante situaciones de sequía.
En toda la demarcación de Tarragona, ocho municipios están obligados a redactarlo: Calafell, Cambrils, Reus, Salou, Vila-seca, Tarragona, Valls y el Vendrell. Según los registros de la ACA hace poco más de un mes, Calafell, Valls y el Vendrell no lo habían presentado aún. El de Vila-seca estaba en trámite y los de Tarragona, Salou y Cambrils eran desfavorables. El de Reus y el de Torredembarra, que no estaba obligada a presentarlo, son los únicos favorables.
Multas por el retraso
Un mes y medio después, todos los ayuntamientos ya han presentado su plan. Algunos con sanciones de por medio. Valls tuvo una multa de 1.500 euros, que se redujo en un 40% por pago voluntario y se quedó en 900. El municipio de Calafell también fue sancionado con 900 euros por carecer del documento. El Ayuntamiento aseguró entonces que disponía del documento y que estaba tramitándolo mientras discutía con el ACA por una superación de los límites mensuales de consumo en el suministro que recibe del Consorci d’Aigües de Tarragona (CAT). De igual forma, el Vendrell recibió otra multa, sin embargo, fuentes del consistorio apuntan que «están preparándose alegaciones porque el Ayuntamiento ya estaba tramitando el plan». Los tres sancionados han entregado ya su documento a la ACA, quien se encuentra examinándolo.
Vila-seca y Salou presentaron un primer plan conjunto, ya que sus infraestructuras de abastecimiento y saneamiento son compartidas, pero se les indicó que debían hacerlo por separado. Tras esta reclamación, Vila-seca lo presentó hace unas semanas y Salou lo ha enviado durante el último mes.
El de Cambrils y el de Tarragona siguen siendo desfavorables. Fuentes del consistorio cambrilense indican que «el plan tiene unas observaciones por parte de la ACA, algunas de carácter semántico y otras más de tipo técnico, que están incorporándose al redactado; además, se han tomado medidas como vaciar las fuentes, y también se han iniciado campañas de concienciación dirigidas a la ciudadanía».
En Tarragona, fuentes municipales apuntan en la misma línea: «La ACA devolvió el plan con algunas enmiendas y se calcula que, durante el mes de mayo, volverá a enviarse el texto, pero lo que se está corrigiendo son pequeñas informaciones para estar más adaptados al plan general de la Agència».
¿Qué es ‘desfavorable’?
Según la Generalitat de Catalunya, el hecho de que un plan sea desfavorable puede deberse a diferentes casuísticas: bien pueden ser pequeñas indicaciones a corregir o algunas de carácter más grave.
En todo el territorio, cuatro ciudades aún no han presentado el plan: Cerdanyola del Vallès, Cornellà de Llobregat, Figueres y Viladecans.
