El Ayuntamiento de Tarragona reconvertirá a low cost más de 600 zonas verdes de parking del entorno del Hospital Joan XXIII. Según ha podido contrastar el Diari, el alcalde Rubén Viñuales (PSC) tiene previsto firmar esta misma semana un decreto en el que modifica la tarifa de parking de las zonas reguladas de la zona de influencia del centro sanitario de referencia de la provincia.
La decisión, que todavía no se ha ejecutado pero sí que se ha tomado la decisión política, comportará que vecinos, usuarios del hospital y familiares de las personas hospitalizadas pasen de tener que abonar un coste de 4 euros cada dos horas para no residentes –y de 0,40 al día para residentes– a pagar un euro al día –0,40 para residentes– por estacionar el vehículo en las inmediaciones del Joan XXIII. Este sistema se complementará con las 388 plazas del parking disuasorio ubicado en la calle Guillem Oliver, junto al hospital, que se pusieron en liza el pasado mes de diciembre.
La propuesta será «provisional» mientras «la Generalitat no garantice el estacionamiento de sus trabajadores en Tarragona, tal y como sí que pasa en el resto de hospitales del ICS», según recalcan fuentes del gobierno de la Plaça de la Font. De hecho, hace semanas el propio Viñuales envió una carta a todos los grupos parlamentarios en la que les pedía que se comprometieran a garantizar el estacionamiento de los profesionales del hospital con una nueva planta en el parking concesionado del exterior del recinto.
Pese a ello, las fuentes consultadas afirman que únicamente el PSC ha firmado la propuesta del máximo dirigente socialista, «pese a que en la visita al CAP La Granja el conseller de Salut –de ERC– manifestó su posicionamiento favorable», lamentan las fuentes del ejecutivo tarraconense.
En reiteras ocasiones el máximo representante municipal ha lamentado que el Govern «realice las obras del hospital sin garantizar el estacionamiento», y critica que esto «ahora tenga que hacerlo el consistorio, cuando en otros hospitales esto no pasa».
Reordenación general
En el decreto, que con toda probabilidad firmará entre hoy y mañana, el alcalde no se centrará únicamente en la zona regulada del entorno de Joan XXIII, sino que dibujará una «reordenación general», con una batería de propuestas sobre las zonas reguladas de la ciudad.
En este sentido, recientemente trascendió que al final no se pintarán las 400 plazas previstas de pago en el barrio de la Vall de l’Arrabassada, mientras que también se dará una tarjeta para pagar un máximo de 5,95 euros por ocho horas a 17 vehículos de los trabajos de asistencia domiciliario de CatSalut, entre otras medidas.
Confusión de Esquerra
La novedad del cambio de tarifa saltó a raíz de una nota de prensa de ERC en la que aseguraba que el gobierno daba un «paso atrás» en las zonas reguladas que se pusieron en marcha en febrero. Los republicanos incluso enviaron fotografías en las que aparecían carteles de la Brigada Municipal en los que detallaba que entre ayer y el viernes se llevarían a cabo trabajos de «pintura», que a juicio de Esquerra consistían en «revertir las malas decisiones en movilidad».
Sin embargo, fuentes del Ayuntamiento negaron poco después que los trabajos que empezaron ayer sean para llevar a cabo el cambio de zona azul o verde a naranja, sino que los avisos se refieren «a unos trabajos de pintura que la Brigada realziará mediante diferentes actuaciones de señalización vial, como pasos de peatones». Pese a ello, lo cierto es que la medida avanzada por el principal partido de la oposición sí se llevará a cabo y es, a juicio del concejal republicano Xavier Puig, «una victoria del sentido común» que, sin embargo, genera dudas en ERC porque «llega en pleno periodo electoral».
Entre el resto de partidos, el PP critica que «el cambio demuestra la improvisación del gobierno municipal y nos da la razón con lo que siempre hemos defendido: no son necesarias nuevas zonas de aparcamiento regulado». Por su parte, Jordi Collado (ECP) lo considera un «pim-pam-pum» pero «tiene sentido que rectifiquen: las zonas no funcionaban». De hecho, solo Junts aplaude la decisión. «Es bueno rectificar. Ya les dijimos que somos partidarios de la rotación, y que si debían modificar, que lo hicieran con rigor. Gobernamos desde la oposición», añade.
Satisfacción de los médicos
La iniciativa es aplaudida por el Col·legi de Metges. «Estamos satisfechos porque es una decisión que beneficiará a los trabajadores, a los pacientes y a los ciudadanos, que ahora están colapsados. Es política útil», considera Sergi Boada. En la misma línea se expresa Tani Francesch, del Sindicat de Metges. «La zona azul no tiene sentido. Esta zona no es la Rambla o el Mercat, no hay tanto comercio». Desde la puesta en marcha de pago por aparcar. Francesch indica que «muchos trabajadores tienen que venir antes para buscar sitio, o estacionar bastante lejos. Ahora, en cambio, pagar un euro al día es una decisión razonada».
El presidente de la Associació de Veïns del Parc del Francolí, Jordi Miguel, lamenta conocer «por la prensa» las decisiones del Ayuntamiento, ya que la concejal de Mobilitat, Sonia Orts (PSC), «todavía no ha querido reunirnos con nosotros. Solo lo ha hecho Berni Álvarez», detalla.
