Tarragona es la ciudad más grande de Catalunya en tener el distintivo de Vila Florida, que sirve para realzar la riqueza natural y paisajística de Cataluña y Andorra. Mediante este reconocimiento público se destacan proyectos de ajardinamiento, ornamentación floral y cultura del verde urbano que, tanto en el ámbito público como privado, acontezcan un ejemplo a seguir.
“Este distintivo –remarca el conseller de Territori, Sostenibilitat y Medi Ambient, Xavier Puig,- es un reconocimiento al trabajo que se hace desde muchas áreas como la de Brigada, Parques y Jardines, Medio Ambiente, Limpieza, Educación, Comercio, Ocupación o Juventud". Y añade: “Nos gusta que Tarragona sea la capital más grande de Cataluña que es vila florida. Pensamos que esto nos puede ayudar a captar turismo de proximidad y que puede animar otros municipios a trabajar para mejorar sus espacios verdes”. El conseller Puig se muestra convencido que “es un buen momento para hacer esta apuesta, ahora que las playas son nuestro mejor paseo”.
Esta iniciativa es fruto de una moción que presentó Junts per Tarragona y, en concreto, la consellera Elvira Vidal, que colabora en el grupo de trabajo municipal dedicado a las Viles Florides.
Elvira Vidal apunta que “la situación de pandemia y el confinamiento nos ha hecho valorar mucho más los espacios abiertos, las zonas verdes y las flores. Tarragona tiene rincones preciosos y otros con un gran potencial que hay que explotar, solo hace falta que nos lo creamos. Hablar de Viles Florides no es solo referirse a plantar flores, es hacer un ejercicio de autoestima y fomentar una ciudad más amable, sostenible y con calidad de vida”. Y añade Xavier Puig: “Las Viles Florides dan valor a las personas, porque se trata de hacer un urbanismo pensado para los ciudadanos y ciudadanas, así como favorecer el comercio y la sostenibilidad”.
La importancia del verde en proyectos como la Isla Corsini o la calle Orosi
En este sentido, el conseller de Territori, Sostenibilitat i Medi Ambient apunta que proyectos como la transformación de la Parte Baja y la calle Orosi, la Isla Corsini o la Plaza Catalunya de Sant Pere i Sant Pau se impregnarán de este cambio de filosofía. “Nos motiva mucho formar parte y nos anima a compartir el reto con la participación de toda la sociedad, sobre todo vecinos, entidades y comercios. Trabajamos para transformar una Tarragona con más espacios verdes urbanos, y también unas playas y una Anilla Verde más natural”.
Ayer se celebró la primera comisión donde se presentó este proyecto de Viles Florides a los grupos municipales del Ayuntamiento de Tarragona, así como los técnicos de las áreas implicadas. Próximamente se convocarán las entidades vecinales y comerciales por también dar a conocer los detalles de esta distinción.
La distinción de Tarragona como Vila Florida la recibió el pasado marzo, en plena pandemia. En los próximos días se colocarán placas distintivas ante espacios emblemáticos como la rotonda de la Vía Augusta (ante la plaza de la Unesco), la rotonda junto al hospital Joan XXII que confluye con la calle doctor Mallafré o la Plaza Imperial Tàrraco (por la entrada de la Vía Roma). Entre abril y mayo (todavía está por definir), un jurado formado por integrantes de la Confederación de Horticultura Ornamental de Cataluña (CHOC) –que es la entidad que promueve la transformación de rincones, pueblos y ciudades- visitará Tarragona y decidirá el grado de distinción que lo otorgará, es decir, de uno a cinco, que es la máxima categoría.