El 60% del superávit municipal del 2024 –de 14,7 millones de euros– se destinará a rebajar deuda. Así se especifica en el modificativo de crédito que este miércoles pasará por la comisión de Hisenda previa al pleno del 21 de marzo, en el que se desprende que el gobierno municipal amortizará dos préstamos por valor de 8,5 millones y concertará otro de 4,7, que principalmente se usará para invertir 3,6 millones en diez nuevos buses híbridos.
Las dos iniciativas financieras para reducir la mochila del pasivo se usarán para sufragar buena parte de dos créditos de CaixaBank. En uno de ellos se destinarán 6,9 millones de euros, que servirán para reducir considerablemente el capital que queda por amortizar. Según el informe del viceinterventor general sobre la liquidación del presupuesto del 2024 el pasado 31 de diciembre restaban por pagar 10,3 millones de los 20,6 que se refinanciaron en 2016.
Asimismo, el otro préstamo que se amortizará será por valor de 1,5 millones de euros. En este caso el crédito se liquidará, toda vez que el capital pendiente era de 1,7 millones al cierre del ejercicio anterior, cuando en 2015 se habían solicitado 12.
La reducción extra de la deuda será de 8,5 millones de euros, que servirá para seguir bajando la ratio del pasivo, situada ahora en el 68,36% entre lo pendiente por pagar a las entidades financieras y los ingresos corrientes.
Junts, OK; ERC y ECP lo estudian
Paralelamente a la rebaja de la deuda, el consistorio solicitará también un nuevo préstamo, de 4,7 millones de euros. El Ayuntamiento opta por esta vía debido al hecho de que el Estado no tiene los presupuestos para 2025 aprobados, por lo que de momento el consistorio no puede destinar parte del sobrante del año pasado a «inversiones sostenibles». Por ello, el ejecutivo de la Plaça de la Font «congela» seis millones de euros del superávit «a la espera de ver qué es lo que pasa con las cuentas del Gobierno Central», apuntan fuentes municipales. El colchón económico del 2024, esto sí, permite al consistorio acudir al mercado financiero para no ver paralizada su actividad.
«Debemos tener en cuenta que, pese al crédito, continuamos reduciendo la deuda viva del Ayuntamiento», indica la concejal de Hisenda, Isabel Mascaró (PSC), quien recalca que, por una parte, el modificativo «nos permite cumplir con la obligación legal de amortizar deuda» y, por otra, «tirar hacia adelante proyectos de ciudad». En este sentido, se impulsará la compra de diez autobuses híbridos «para seguir descarbonizando y ampliar la flota de la EMT», indica la presidenta de la compañía municipal, Sonia Orts (PSC), quien valora que «al final de este mandato» se habrán actualizado el 50% de los vehículos.
Junts votará a favor porque «la negociación del presupuesto hizo posible la dignificación de Murs i Espais y el depósito de la Móra», indica Jordi Sendra, mientras que ERC y ECP están estudiando los números para decidir su posicionamiento de cara a la primera gran operación económica del 2025.