Uno de cada cuatro municipios que dependen de la Agència Catalana del Agua (ACA) sigue superando los límites de consumo de agua establecidos en el contexto actual de sequía.
Según los datos del mes pasado, 147 poblaciones de las 568 que han registrado datos (25,8%) exceden los litros permitidos por persona y día. Además, casi la mitad, un 45%, consumieron más agua por persona en diciembre de 2024 que un año antes, mientras que el resto redujo su consumo.
El Parlament vota este miércoles si valida o anula el decreto ley del Govern que deroga las sanciones a los municipios que superen los límites. Sin embargo, fuentes de la ACA detallan que, sea cual sea el resultado de la votación, el centenar de expedientes sancionadores en curso ya han sido anulados.
En diciembre de 2023, un 39% de los municipios dependientes de la ACA sobrepasaban los límites de consumo, una cifra que ahora se sitúa en el 25%. Los límites están ligados al estado de sequía de cada municipio, que ha ido variando a lo largo de 2024.
Por ejemplo, en estado de alerta, los volúmenes totales de agua que entran en el depósito municipal para el abastecimiento de la población no pueden superar los 250 litros por habitante y día, incluidas las actividades económicas y comerciales. Esta cifra baja a 230 en estado de excepcionalidad, a 210 en preemergencia y a 200 en la primera fase de emergencia por sequía, aunque la institución concede un margen adicional en casos concretos.
A pesar de que ahora más municipios se ajustan al máximo permitido, los litros consumidos por persona y día son muy similares entre diciembre de 2023 y diciembre de 2024. Según los cálculos de ACN a partir de los datos de la empresa encargada de planificar y gestionar el ciclo integral del agua en Catalunya, hace un año y un mes el consumo medio por persona y día era de aproximadamente 186 litros, mientras que el mes pasado había bajado muy ligeramente hasta los 184.
Variaciones en el consumo de agua durante 2024
Durante la primavera de 2024, los consumos cayeron por debajo de los 170 litros, coincidiendo con el estado de emergencia por sequía declarado en el sistema Ter-Llobregat el 1 de febrero, lo que afectó a más del 80% de ciudadanos de los municipios gestionados por la ACA.
No obstante, los niveles volvieron a subir por encima de los 180 litros con la desescalada, que comenzó el 7 de mayo con el paso de emergencia a excepcionalidad, y el 18 de junio a alerta, el estado actual del Ter-Llobregat.
A pesar del ahorro de agua, especialmente durante la pasada primavera, entre el último mes de 2023 y el de 2024 los consumos vuelven a ser similares. En 254 de los 567 municipios con datos para ambos meses (45%) incluso han aumentado. En 295 son más bajos (52%) y en los 18 restantes (3%) el consumo es el mismo.
Los municipios pequeños consumen más agua
Los datos más recientes de la ACA, del mes pasado, reflejan que varias poblaciones de menos de 2.000 habitantes encabezan el ranking de litros por persona y día:
Sant Feliu de Buixalleu (La Selva, 772 litros), Pedret i Marzà (Alt Empordà, 697), Sant Agustí de Lluçanès (Osona, 670), La Riera de Gaià (Tarragonès, 666) i Querol (Alt Camp, 626).
![Pantà de Riudecanyes. Foto: Alfredo González $!Pantà de Riudecanyes. Foto: Alfredo González](http://www.diaridetarragona.com/binrepository/768x511/0c40/768d432/none/15017645/BLBT/2354370_241-2354370_20250129110940.jpg)
Entre los municipios de más de 5.000 habitantes, Roda de Berà (Tarragonès, 521) es el que tiene el consumo más alto, aunque no supera ningún límite, ya que está en prealerta. Le siguen Canyelles (Garraf, 448), Matadepera (Vallès Occidental, 416) y Mont-roig del Camp (Baix Camp, 402), municipio que incluye el núcleo de Miami Platja.
En general, los municipios pequeños registran un consumo por persona y día más alto que los más grandes. De los municipios con más de 100.000 habitantes, solo Girona sobrepasó los 180 litros, una circunstancia que también se dio en Granollers, Vilanova i la Geltrú, Rubí y Sant Cugat del Vallès, entre los de 50.000 a 100.000 habitantes. En cambio, entre los de menos de 2.000 habitantes, la mayoría superan los 180 litros.
Los expedientes sancionadores han sido anulados
El pasado 23 de diciembre, el Gobierno aprobó un decreto ley para derogar el régimen sancionador por la superación de las dotaciones máximas para el abastecimiento de la po»blación en situación de sequía. Cuando el consejo ejecutivo flexibilizó la normativa, había un centenar de expedientes sancionadores en trámite, que quedaron anulados como consecuencia.
En algunos casos, las sanciones ya se habían confirmado, pero los municipios aún no habían pagado las multas resultantes, por lo que estas también quedan anuladas.
Independientemente de la votación del Parlamento de este miércoles para ratificar o rechazar el decreto ley de diciembre, los expedientes que se han cerrado ya no se pueden reabrir. Sin embargo, si los diputados no aceptan los planes del Govern de la Generalitat, el régimen sancionador volverá a estar vigente y los nuevos expedientes que se abran a partir de entonces sí podrán derivar en multas.