Un pesquero se hundió, a primeras horas de este domingo, en el puerto del Serrallo. El barco llevaba años amarrado. La Autoritat Portuària instaló barreras de contención para evitar que se desparramara el poco combustible que había en los depósitos.
El pesquero Chimo, de un calado de ocho metros, estaba atracado en el Moll de Pescadors. Posiblemente por el hecho de que hacía tiempo que no se hacia mantenimiento –se encontraba en un importante estado de abandono– , sobre las nueve y media de la noche comenzó a hundirse por la zona de popa.
Tras recibirse el aviso, Salvamento Marítimo envió a la zona la lancha Salvamar Formalhaut, que cuando llegó a la zona nada pudo hacer para evitar el hundimiento total. Paralelamente, la Autoritat Portuària activó su Pla Interior Marítim (PIM) en fase de alerta y diversas embarcaciones comenzaron a a instalar barreras de contención.
No había prácticamente gasoil pero sí muchas cajas y otros elementos, que comenzaron a flotar, por lo que fueron retiradas. La Salvamar incluso retiró una nevera. La situació quedó controlada sobre las doce de la medianoche.
Esta mañana continúan instaladas la barreras de contención.
El pesquero, con matrícula 3·TA·3·2655 y de 15 metros de eslora, fue construido en 1975 en los Astilleros de Tarragona.
Segundo incidente de la noche
Por otra parte, sobre las 00.50 horas de esta madrugada se recibió el aviso de que el pesquero Cranqui había sufrido una vía de agua, posiblemente después de haber chocado contra algún elemento en la zona de la Illa Dragonera, en Balears.
Salvamento Marítimo envío a la zona a la lancha Salvamar Polaris, con base en el puerto de Vilanova i la Geltrú, que sobre las 2.35 horas ya estaba al lado del pesquero rumbo al puerto del Serrallo.
Sobre las cinco y cuarto de la mañana, las dos embarcaciones estaban entrando a puerto. Se retiraron momentáneamente las barreras de contención para que el Cranqui pudiera ser sacado del agua en la zona del varadero.