Una pareja de halcones ha nidificado dentro de una de las dos cajas nido instaladas en el Port de Tarragona, en lo alto de los silos de Cementos Portland, en el Moll de Reus, y cuentan con cuatro nuevos polluelos que, el pasado martes 30 de abril, fueron anillados a cargo de la entidad Galanthus.
Este proceso permitirá hacer el seguimiento y reconocerles una vez sean adultos y vuelen por el puerto y la ciudad. Esta es la segunda vez en los últimos diez años que sale adelante una nueva generación de halcones peregrinos en el Port de Tarragona, ya que el año pasado una pareja tuvo 3 polluelos.
La Autoritat Portuaria de Tarragona (APT) trabaja para asegurar esta presencia continuada de halcones en el Port para regular la población de palomas.
Hace tiempo que, de manera natural, la presencia de halcones y otras rapaces es habitual en el Port de Tarragona. El atractivo para esta especie es sin duda, las palomas y tórtolas que forman parte de la base de su alimentación.
El avistamiento de estas aves fue el detonante que llevó la entidad Galanthus a iniciar un proyecto de instalación de dos cajas para intentar fijar estos halcones salvajes en el territorio, con la colaboración de la dirección de Acció Climàtica del APDO.
Los 4 individuos de halcón peregrino forman parte de la primera generación que se produce dentro de una de las nuevas cajas instaladas en el Port. En el año 2003, después de un intento, el nido no tuvo continuidad.
Diez años después, en 2023, por primera vez nacieron tres polluelos de halcón peregrino (Falco peregrinus). Las crías salieron adelante, pero la pareja construyó el nido en una pequeña plataforma de los silos de Cementos Portland, a 37 metros de altura, en el Moll de Reus.
La situación de la plataforma imposibilitó el anillamiento de los polluelos y su seguimiento con condiciones óptimas.
Éxito del proyecto
Posteriormente, la Autoritat Portuaria de Tarragona contactó con el especialista Ferran Aguilar (Medigraphic) para estudiar la mejor manera para favorecer el asentamiento de halcones salvajes en el Port, como parte de la estrategia de control de la población de palomas con métodos naturales.
Para lograr este objetivo se decidió colocar una nueva caja nido por encima de la plataforma donde habían criado el año anterior. Se trataba de intentar atraer a la pareja a instalarse en este nuevo espacio, de manera que resultara más fácil su seguimiento y su nidificación.
También se pretendía garantizar la seguridad de los polluelos ante el peligro de caídas antes de los primeros vuelos.
Responsables del proyecto consideran que “gracias a la coordinación y el trabajo de varios expertos y a la colaboración de la empresa Portland, el Port de Tarragona cuenta, a estas alturas, con más ejemplares de halcones que ayudarán a preservar estos pájaros rapaces y a controlar de manera natural el exceso de palomas y tórtolas”.