La furgoneta del Àrea Regional de Recursos Operatius (ARRO) de los Mossos d'Esquadra -los antidisturbios- circulaba esta madrugada de lunes por Tarragona cuando uno de los agentes divisó en el mar algo que se movía.
Faltaban minutos para la una de la madrugada cuando el conductor de la furgoneta frenó el vehículo y de ella bajaron los mossos para verificar si aquello que se había visto mar adentro era una persona.
La linterna enfocó el agua y localizó la cabeza de una persona que se encontraba ya lejos de la orilla. Sin pensárselo dos veces, el equipo de Mossos se repartió entre los que custodiaron el armamento en tierra y los que entraban al agua en busca de la persona, en una noche donde las tormentas habían dejado un mar con oleaje fuerte.
Los agentes llegaron a la altura de la persona, una mujer de mediana edad, que se encontraba ya con el agua hasta la altura del cuello. Los agentes procedieron a sacarla hasta la orilla del Miracle mientras los que se habían quedado en tierra pedían una ambulancia urgente.
Mientras llegaba los sanitarios del SEM (se activaron dos ambulancias, aunque una dio media vuelta al no ser necesaria su presencia), los agentes dejaron a la mujer en la arena y la colocaron de forma lateral para facilitar la respiración y que no afectar el agua que se hubiera tragado. Seguidamente empezaron las maniobras de reanimación, que terminaron los profesionales del SEM, llegados poco después.
La víctima, consciente, fue derivada al hospital de Santa Tecla con hipotermia, pero sin más lesiones aparentes.
Se desconoce cuáles fueron los motivos de la mujer de entrar en el agua a esas horas y tras las tormentas. Lo cierto es que la patrulla del ARRO estuvo en el lugar y en el momento justo para evitar una tragedia.