Con hachas, desbrozadoras o azadas. Cualquier herramienta era buena este sábado por la mañana para participar en los trabajos de desbroce del tramo inicial del canal a la entrada a la urbanización La Móra, en Tarragona.
Los vecinos se han puesto manos a la obra después de que, a pesar de sus peticiones, el Ayuntamiento no lo ha hecho. Se trata en cierta forma de una medida de fuerza para que el Consistorio realice unos trabajos sencillos, que consisten en retirar la vegetación en este tramo de unos 200 metros, antes que el canal se convierta en una canalización totalmente cimentada.
El canal tiene aproximadamente unos 500 metros, desde que empieza tras unos campos de cultivo situados cerca de la calle Baix Camp hasta su desembocadura en la playa.
«La última vez que se hizo una limpieza completa fue en invierno de 2021», asegura el actual presidente de la Associació de Veïns la Móra, Albert Franquès. Pero los trabajos fueron sufragados por la propia entidad vecinal: «Contratamos una empresa, que vino con un tractor con una fresadora y lo dejó todo limpio», recuerda. Por ello, cuando se produjo la borrasca de Santa Tecla en 2022 «todo seguía muy limpio».
Durante el verano del año pasado, el Ayuntamiento hizo una actuación que el dirigente vecinal considera «mínima». Y actualmente, lo que sería el cauce del canal estaba lleno de hierbajos de hasta un metro de altura y también de algunos árboles, que este sábado también fueron arrancados.
La actuación solo se ha centrado en los primeros 100 metros del canal –hay otro centenar que también tiene vegetación–. «Desde febrero, el Ayuntamiento nos dice que lo limpiará, pero estamos en abril y no se ha hecho», comenta Franquès.
Es un contrato menor, con un presupuesto inferior a los 15.000 euros, por lo que el Consistorio puede hacer una contratación directa. En principio es para realizar dos actuaciones al año.
Ante esta impasividad del Ayuntamiento, el pasado miércoles, la asociación de vecinos decidió tirar millas y ser ellos mismos los que empezaran la limpieza. Y así lo han hecho esta mañana.
Albert Franquès asegura que, ante una nueva dana, es posible que se vuelva a desbordar y que, además, lo que arrastre el agua tapone los agujeros de los puentes por donde pasa el canal.
Desde la Associació de Veïns se valoraba positivamente la respuesta vecinal ya que una treintena de personas se sumaron a la iniciativa. Y Franquès advierte: «Si el Ayuntamiento no viene a limpiar, lo volveremos a hacer nosotros»