En el año 2023 nacieron 54.182 bebés en Catalunya, según los datos provisionales del Instituto d’Estadística de Catalunya (Idescat). Esta cifra representa una disminución del 3,9 % en relación con los datos del 2022. En el Camp de Tarragona, los nacimientos han bajado un 1,8 %, mientras que en Terres de l’Ebre han disminuido en un 4,1 %.
En la mayoría de comarcas catalanas (28), disminuyó el número de nacimientos, pero los mayores descensos se registraron en la Segarra (-20,1 %, afectada por los cambios territoriales), Urgell (-17,9 %) y el Bages (-14,1 %). Por el contrario, las comarcas que registran los mayores incrementos en la cifra de nacimientos son el Pallars Jussà (14,9 %), Cerdanya (11,7 %) y Arán (10,7 %).
La disminución de las cifras de nacimientos de los últimos años se inscribe en una tendencia a la baja de la natalidad que ha sido continuada desde 2009 (85.000 nacimientos), según indica el Idescat en un comunicado. En 2023 la tasa bruta de natalidad es de 6,8 nacidos vivos por cada 1.000 habitantes, inferior a 2022 (7,2 ‰) y 2009 (11,4 ‰). En Tarragona, la tasa bruta de natalidad se sitúa en 7,1 y en las Terres de l’Ebre en 6,5.
De los más de 50.000 nacidos en toda Catalunya, 35.408 son hijos de madre española, lo que representa una disminución de 2.551 bebés (-6,7 %), y los 18.774 restantes son hijos de madre extranjera, un aumento de 351 en comparación con el año anterior (1,9 %). Entre los bebés de madre extranjera, la mayor frecuencia corresponde a los hijos de madre marroquí, seguidos, en orden decreciente, por los hijos de madre pakistaní (1.334), colombiana (1.157), hondureña (961) y rumana (883). Salou es el tercer municipio de Catalunya con más de 20.000 habitantes que cuenta con un porcentaje más elevado de hijos de madre extranjera, con un 58,2 %.
En cuanto a la edad media de las madres de los bebés, en Terres de l’Ebre es donde la maternidad es menos tardía (31,61 años); además, la edad media de dar a luz al primer hijo es a los 30,18 años.
