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Las mejores infraestructuras de Tarragona tienen 2.000 años

El Museu d’Història organiza rutas guiadas para conocer los secretos del Pont del Diable y su entorno ecohistórico

23 marzo 2025 19:41 | Actualizado a 23 marzo 2025 22:24
Se lee en 1 minutos
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Si hay algo en que los romanos fueron auténticos maestros es la ingeniería. El Aqüeducte de les Ferreres (o el Pont del Diable, si lo prefieren) es una maravilla. Es indudable que Tarraco cuenta con un incomparable patrimonio. La ciudad tiene grandes joyas de la antigüedad: el circo, las murallas, el anfiteatro... Pero el acueducto es distinto. Parece imposible cómo se conserva, imponente, con sus grandes arcadas, desde los tiempos de la Tarraconensis. Estos 217 metros de piedra, alzados a 27 metros sobre el suelo, que datan del s. I aC en la era de Augusto, poco tienen que envidiar al Acueducto de Segovia o al Pont du Gard.

El Museu d’Història sabe bien que en Tarragona tenemos una maravilla de la ingeniería civil antigua. Por ello, este es el tercer año que organiza visitas guiadas para que la ciudadanía pueda conocer mejor, no solo el propio acueducto, sino todo el parque ecohistórico que lo rodea.

Ayer se celebró la primera de las rutas, pero quienes se hayan quedado con ganas al leer este artículo tienen la oportunidad de hacer la visita los domingos 6 y 27 de abril y el 1 y 8 de junio.

Paseo entre naturaleza e historia

La lluvia dio tregua y la expedición pudo partir. A una veintena de personas les esperaba tres horas de recorrido entre miles de años de historia, rodeados por la naturaleza. El grupo pudo descubrir los diferentes secretos que esconden los senderos. Canteras romanas, antiguos caminos de carros, la barraca de piedra seca de Tasías o el horno de cal.

Tampoco faltó la visita al abandonado Mas dels Arcs, su bodega y su imponente columna coronada por un ángel. Es una verdadera travesía por nuestra civilización, de la prehistoria a los contemporáneos etilenoductos. Un gran contraste... ¿Ustedes sabían que el entorno del Pont del Diable es también un yacimiento prehistórico? Se han hallado restos de sílex de hace milenios, muchos.

Lo ‘mejor’ de la visita se deja para el final: el gran acueducto. De postal, se alza, excelso, sobre el barranco, los árboles y colinas que ocultan su milenario esplendor.

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