«Poco después de que se estrenara el documental nos llamó una mujer que había reconocido en el testimonio de Rocío Carrasco a algo que le había pasado a una prima. Ha habido un aumento de las llamadas de personas que se han dado cuenta de la situación que viven. Esa mujer nos dijo que su familiar había pasado por lo mismo y que ella lo había visto», explica Ekaterina Kàtcheff, coordinadora territorial en Tarragona del Institut Català de les Dones.
El documental sobre el popular y mediático personaje que emite Telecinco desde marzo ha tenido un impacto que en la entidad conocen bien. «El programa ha removido las conciencias de las víctimas pero también del entorno. Por eso el efecto es positivo, porque pone en alerta, hace visible una vivencia psicológica que es muy difícil de reconocer y la hace perceptible para el entorno y hasta para los mismos profesionales», indica Kàtcheff. ¿Qué explica exactamente la hija de Rocío Jurado en Rocío, contar la verdad para seguir viva, una docuserie de 13 capítulos que bate récords de audiencia? El documental, narrado por ella misma, relata todo el infierno que, según su testimonio, ha vivido durante 25 años al lado de su expareja, Antonio David Flores, la manera en que sus hijos se alejaron de ella hasta perder el contacto y cómo la presión social y mediática estuvo a punto de llevarla al suicidio el 5 de agosto de 2019.
De las 63 denuncias por teléfono de febrero se ha pasado a las 113 de abril en la provinciaCarrasco da, por primera vez, su versión de unos hechos contados por su exmarido vastamente en los platós de televisión durante más de dos décadas. «Rocío hace un esfuerzo muy grande para contar unas vivencias de hace mucho tiempo, que rescata del pasado y las explica ahora, cuando encuentra el apoyo del entorno. Quiero creer que cualquier persona, aunque no fuera famosa, con un relato así despertaría conciencias como lo ha hecho ella», indica Kátcheff.
Los datos así lo corroboran, en la línea de lo que dijo en su momento la ministra de Igualdad, Irene Montero, que vinculó el incremento de las llamadas a los teléfonos contra la violencia machista a la sensibilización a la narración de Carrasco. En marzo, el número 016 recibió 77 llamadas de la provincia de Tarragona. Es un 13% más en relación con el mismo mes del año anterior (68). En el global de Catalunya el aumento fue del 18% y en España del 15%. De esas 77 llamadas, en 54 ocasiones las efectuaron las propias usuarias y en 22 casos fueron a cargo de allegados o familiares, según el Boletín Estadístico de la Delegación del Gobierno contra la Violencia de Género.
El Institut Català de les Dones (ICD) cifró en un 61% el aumento de las llamadas al 900 900 120 en Catalunya durante la última semana de marzo, entre el 22 y el 28. Hay que tener en cuenta que el primer capítulo de la serie, que aún dura, se emitió el 21 de marzo. Ese número de teléfono también ha registrado un incremento en Tarragona, no solo en marzo, sino también en abril. En los cuatro primeros meses recibió 340 llamadas (308 del Camp de Tarragona y 32 en las Terres de l’Ebre).
La violencia machista se ha cobrado dos vidas este 2021 en la provincia. La última ha sido esta misma semana en CreixellCasi cuatro al día
El aumento es palpable: de las 63 denuncias de febrero, a las 85 de marzo y las 113 de abril –casi cuatro al día–, último mes cerrado y con recuento. Se trata, pues, de una subida de casi el 80% en ese intervalo de dos meses. Especialmente acentuada es la evolución en el Camp de Tarragona: 53 llamadas registradas en febrero, 77 en marzo y 105 en abril, casi el doble. El alza es más ligera en las Terres de l’Ebre y en el Penedès pero también hay un crecimiento, como se experimenta en el global de Catalunya: de las 833 llamadas de febrero a las 1.262 de abril, un 51% más.
Sobre el efecto del documental, la presidenta del Institut, Laura Martínez, comentó: «El hecho de que una mujer con un gran altavoz comparta estas situaciones hace que muchas mujeres se vean reflejadas y hagan el primer paso para pedir ayuda». Martínez recalca que «los testimonios de mujeres supervivientes tienen un impacto positivo en la visibilización de la violencia de las mujeres que la han sufrido».
Rosa Casas, antropóloga, educadora y trabajadora social, ofrece matices a la denuncia de Rocío: «Es bueno que salga el tema más en los medios, es una manera de visibilizar, y de que gente que consume un cierto tipo de contenidos que podrían catalogarse como telebasura tome conciencia».
Casas celebra la presencia mediática, pero admite reservas: «No he visto el documental, me da un poco de miedo por según cómo estén tratando el tema, regocijándose en el morbo, en el dolor ajeno. La visibilización no puede ser a costa del victimismo, porque eso es lo que le conviene al sistema heteropatriarcal. No nos podemos quedar en el ‘pobrecita’, sino que nos tenemos que centrar en los mecanismos de lucha, de resistencia y de regeneración».
Casas se muestra muy crítica con el sistema judicial, uno de los debates que ha abierto el programa, puesto que Antonio David Flores nunca ha sido condenado por maltrato: «El sistema judicial es machista. No nos van a dar la razón en el 95% de los casos. Denuncias y dos años después vas a declarar, te van a hacer unas preguntas que te harán daño, van a poner el foco en que tú te has recuperado. No conozco ni a una sola mujer que, saliendo de ese proceso de maltrato, no sea feliz, porque nosotras tendemos al bienestar. Parece que una mujer maltratada tenga que estar toda la vida hecha mierda. Todo el procedimiento está hecho para absolver al maltratador».