La Comisión de Salud Pública decidió ayer recomendar que solo guarden cuarentena, en las etapas de Infantil y Primaria, los alumnos de un aula en la que se den cinco o más contagios de Covid-19. «Con el objetivo de garantizar la presencialidad, se recomendará cuarentena para todo el grupo siempre que se den cinco casos o más de infección activa en un aula o afectación del 20% o más de los alumnos de la clase en un periodo igual o inferior a siete días. En caso de que sean cuatro casos o menos del 20%, se considerarían casos esporádicos y no se recomendaría cuarentena», concretó este órgano, conformado por los técnicos del Ministerio de Sanidad y de las comunidades y reunido de urgencia a tres días del temido regreso al colegio tras las vacaciones de Navidad. Las medidas entrarán en vigor este mismo lunes.
El pasado miércoles, los ministerios de Sanidad, Educación y Universidades dejaron abierto el debate sobre las cuarentenas. En un primer borrador, estos departamentos planteaban la posibilidad de que los alumnos no tuvieran que volver a sus casas aunque hubiera positivos en las aulas, pero las posturas discrepantes de algunas autonomías retrasaron entonces el acuerdo. Andalucía y Madrid pusieron sobre la mesa que fueran los médicos de Atención Primaria o los enfermeros de cada centro los que decidieran sobre un eventual cierre de las clases ante la aparición de un brote. La ministra Darias trasladó la resolución final a la Comisión de Salud Pública, que se pronunció este viernes, aunque siempre sobre la base de mantener la presencialidad todo lo posible, el principal objetivo del Gobierno respecto a la educación durante toda la pandemia.
«Los cambios marcados van dirigidos a garantizar y fomentar lo máximo posible la presencialidad en todos los niveles educativos, reforzando el cumplimiento de las medidas de prevención. Este cambio se adapta a la situación pandémica actual, refleja también el importante avance de la vacunación en todos los grupos de edad y tiene en cuenta que los entornos escolares han demostrado a lo largo de la pandemia ser entornos seguros en cuanto a la transmisión del virus», indicó Sanidad.
Los técnicos del Ministerio han hecho equilibrios entre varios factores. Por un lado, la expansión de ómicron entre los menores está siendo explosiva, con la incidencia acumulada entre los menores de 11 años en el entorno de los 2.300 casos. Pero por otro, la menor gravedad de la enfermedad en los niños, la experiencia del curso pasado, en el que las aulas registraron datos muy bajos de infecciones y la vacunación en esta franja de edad, que ya alcanza el 31,5% (aunque solo con la primera dosis). Según Educación, el 70% de los escolares habrá recibido el primer pinchazo en febrero. La decisión atañe únicamente a los alumnos de Infantil y Primaria. Los de Secundaria, FP y universidades se guían por los criterios de la población general. Así, ante un positivo, se aísla únicamente al contagiado, a sus contactos estrechos o a los compañeros del aula que muestren síntomas compatibles.