El proyecto para unificar en un mismo espacio las oficinas de turismo del Ayuntamiento de Tarragona y Turisme de la Generalitat está en el aire. La iniciativa, que formaba parte del paquete de actuaciones dentro del Porta Tarraco, ha caído de la agenda de prioridades del ejecutivo municipal, por lo que por ahora no se espera el traslado a la sede de la Antiga Audiència, tal y como estaba previsto.
La decisión está en manos del Patronat Municipal de Turisme de Tarragona, que asegura que «tiene que estudiarse el tema». Y, aunque todavía no se da por enterrado definitivamente el proyecto, ahora mismo este organismo asegura que a nivel presupuestario está volcando los esfuerzos en la desestacionalización y en acciones que contribuyan a reforzar la marca Tarragona como destino turístico.
La decisión sobre el futuro de estas instalaciones está en compás de espera hasta que finalicen las obras que tienen que llevarse a cabo en el inmueble de la Plaça del Pallol. Estas hacen referencia a la climatización del edificio, además de la reforma de los baños, que quieren ampliarse para que puedan acceder los turistas, además del personal que ahora está trabajando en las oficinas.
Rechazo de los técnicos
La primera de estas intervenciones ya está en fase de licitación, mientras que la segunda va un paso por detrás y todavía no ha salido a la plataforma de contratación pública. Ambas acciones deben permitir acabar de acondicionar las instalaciones, después que ya tuvo que hacerse una intervención de emergencia para reforzar la escalera, tras detectarse problemas estructurales.
El Ayuntamiento ha aparcado el proyecto, que genera malestar entre los técnicos
Sin embargo, las obras no constituirían el principal inconveniente para que pudiera llevarse a cabo este traslado. En el trasfondo está la operación de reorganización interna del personal del Ayuntamiento. El traslado de las oficinas y los trabajadores del Patronat Municipal de Turismo a la Antigua Audiència comportaba que los empleados del área de Cultura se moverían a la calle Major, donde ya hay el Centre Cultural del Antic Ajuntament. Este movimiento generaría cierto malestar entre los técnicos, razón por la cual ha decidido aparcarse el intercambio de cromos.
La apuesta por concentrar en un mismo espacio las oficinas de turismo municipal y de la Generalitat era uno de los principales ejes de la ciudad en materia turística, dentro del proyecto Porta Tarraco. Aunque esto no comportaba unificar los servicios, pretendía que los visitantes pudieran encontrar en un mismo sitio todos los servicios, como ya se está haciendo en Girona.
600.000 euros de inversión
Esta era una de las patas de un proyecto, que se presentó en 2019, y que pretendía generar un centro de bienvenida y recepción de cara a los turistas en esta entrada de la Part Alta, con el vídeomapping de la Volta del Pallol y un espacio con baños públicos en el Camp de Mart. La irrupción de la Covid, con el consecuente incremento de los gastos que comportó, tan solo son algunas de las vicisitudes que se presentaron por el camino y que impidieron cumplir los plazos.
Se perdió una subvención de 150.000 euros para el proyecto
Finalmente, la administración local perdió 150.000 euros de la subvención que aportaba la Direcció General de Turisme por valor de 300.000 euros y que representaban el 50% de la inversión total prevista.
El director de los Serveis Territorials d’Empresa i Treball de la Generalitat de Catalunya, Jordi Fortuny, asegura que «estamos a la espera de si el Ayuntamiento nos dice que sigue adelante». La administración autonómica expone que había unos recursos que se dejaron perder, por lo que ahora considera que le corresponde al consistorio mover ficha. «Por nuestra parte, la disposición es total», añade.
Mientras tanto, la atención turística desde el Patronat Municipal de Turisme de Tarragona se mantiene en las oficinas de la calle Major y durante los periodos de más afluencia de visitantes se abren las instalaciones de la Rambla Nova. En cuanto a la guingueta del Camp de Mart, la intención del ejecutivo de la Plaça de la Font es poder sacar a concurso la concesión una pequeña terraza con baños. No obstante, se prioriza que antes pueda resolverse este mismo servicio para el Anillo Mediterráneo.
