El Barri del Port de Tarragona ha celebrado este pasado fin de semana la primera fiesta dedicada a la Cruz de Mayo, una tradición de origen andaluz organizada por la asociación de vecinos, la Cofradía del Cristo del Buen Amor y la Asociación Cultural y Folklorica Andaluza. La celebración, que tiene como día principal el 3 de mayo, consiste en adornar una cruz en un altar.
La Plaça dels Carros acogió conciertos de flamenco, bailes de sevillanas, una misa flamenca y una comida de hermandad. La inauguración de la Cruz de Mayo, el sábado, coincidió en la gran plaza del barrio con el semanal Mercat de la Pagesía, al que la concejalía de Comerç añadió actividades como juegos de mesa, con el Club Diógenes Tarragona, o sardanas por parte del Casal Tarragoní.
Durante la inauguración, el alcalde de Tarragona, Pau Ricomà, aseguró que «esta tradición viene de la época del emperador Constantino porque su madre, Santa Elena, fue quién descubrió en Jerusalén el sepulcro de Jesucristo, donde había un trozo de la cruz de Jesús. Desde entonces, la liturgia cristiana tiene el día 3 de mayo como el día del hallazgo de la cruz». Ricomà defendió que «al final se trata de hacer fiestas para todos».
La presidenta de la Asociación Cultural y Folklorica Andaluza, Luisa Márquez, señaló que «para nosotros los andaluces, la Cruz de Mayo es una fiesta muy arraigada, porque en cada pueblo siempre hay un rinconcito con una cruz adornada y es una imagen que tenemos siempre en la retina». Para la presidenta de la asociación de vecinos del Barri del Port, Carmen Puig, «lo de este fin de semana ha sido una manera de dinamizar la plaza».
