Sentido homenaje a Núria, la cocinera de Mas d’Enric asesinada hace justo un año, en el interior de la prisión de Tarragona. Fuera, y en el resto de cárceles catalanas, se ha llevado a cabo un minuto de silencio.
Dentro de Mas d’Enric, en un acto privado, el sobrino de Núria, Pablo Martínez López, ha descubierto una placa en recuerdo de su tía. En ella, se puede observar un grabado de una imagen de ella con su perra Fiona, junto a las siguientes palabras: «Quiero regalarte todas las estrellas que guardaba en mi alma, para que cada una de ellas te recuerde que has nacido para brillar».
Se trata de un texto escrito por la propia Núria en un regalo que un día le realizó a una de sus hermanas. En el acto interno han estado presentes la secretaria general de Mesures Penals del Departament de Justícia, Elena Pérez, el director general d’Afers Penitenciaris, José Maria Montero, el subdirector general de Centres, Pedro Domínguez, la subdirectora general de Tractament, Gemma Torres, y el director del Centre d’Iniciatives per a la Reinserció (Cire), Daniel Ortiz. El resto de los asistentes eran familiares (unas quince personas).

En el exterior del recinto penitenciario, trabajadores de la cárcel y allegados de Núria se han reunido y han realizado una marcha lenta con rosas blancas y con velas. Los ramos de flores se han colocado en la puerta de la prisión.