Hermán Pinedo empezó el mandato como edil de En Comú Podem, pero en 2021 pasó a ser no adscrito tras ser expulsado por mantenerse en el gobierno pese a la marcha de su grupo tras el pacto de ERC con JxTGN y CUP.
¿Decepcionado con la política?
Esperaba un poco más, tengo la sensación de que hemos ido demasiado lentos en algunas cosas, pero estoy contento. Hemos demostrado que un cambio era posible. Es cierto que no se ha podido hacer todo lo previsto porque la pandemia nos hizo daño y luego sufrimos Iqoxe, el Gloria, la suspensión del POUM... En estos cuatro años he conocido a personas buenas, pero también muy malas. Y lo que me han hecho ha sido cruel y complicado de vivir.
Usted denunció haber sufrido ataques de ansiedad.
La sufro desde hace años, pero la situación de 2019 y 2021 la agravó.
Tuvo polémica desde el inicio por pactar en 2019 con ERC.
En la asamblea de la casa del Mar de junio de 2019 participaron todos los inscritos de Podem y Comuns, y por 80 votos a uno se acordó hacer alcalde a Ricomà. Pese a ello, desde Madrid y Barcelona la instrucción de Podemos era que el PSC siguiera gobernando.
¿Esto se lo dijeron por escrito?
En Podemos no son tontos, todo lo hacen en persona o con medios que no puedes demostrar.
¿Quién se lo dijo?
Desde la secretaría de organización. Citaban no sé qué acuerdo en base al cual el PSC tenía que seguir gobernando en Tarragona.
¿Y por qué apostó por ERC?
Nos habíamos presentado por el cambio, no podíamos incumplir nuestra promesa. Era impensable avalar a un gobierno continuista.
Le abrieron expediente por no convocar una asamblea propia de Podemos.
Siempre entendí que la asamblea de la casa del Mar tenía toda la validez y legitimidad. Además, si hubiera convocado solo a Podemos habría ganado dar la alcaldía al PSC.
¿Ahora usted estaría en Podemos si hubiera seguido las indicaciones de la cúpula?
Sí. Me expulsaron por incumplir los principios democráticos, pero quien primero los incumplió fue Podemos poniendo a un candidato para el Congreso (Ismael Cortés) que no pasó por primarias.
Pese a ello, usted se presentó para liderar Podem Catalunya
Sí. Hay una falta importante de liderazgo y de independencia política. Es una sucursal de Madrid.
¿A qué se refiere?
En todas las primarias siempre hay un candidato oficialista «avalado por Pablo Iglesias». ¿Cómo es eso?
Usted y Carla Aguilar avalaban pactar con Junts en 2021?
Se negoció con Junts y CUP desde el primer presupuesto, en enero de 2020.
¿Carla Aguilar lo avalaba?
Ella y la coordinadora local estaban al día de las negociaciones.
¿Por qué se alargó un año y medio la negociación?
Así lo decidió la coordinadora municipal. Tanto Carla como yo estábamos desesperados por ampliar el gobierno.
¿Por qué lo dilató ECP?
En principio, para negociar mejor, dejar pasar tiempo... Las autonómicas de 2021 lo cambiaron todo.
¿El grupo municipal de En Comú Podem firmó un documento de ampliación de gobierno con Junts per Tarragona y CUP?
Sí. Allí se definía el reparto de competencias con el OK de Comuns y Podemos a nivel catalán.
¿Presentaron el acuerdo a las direcciones nacionales?
Teníamos el vist-i-plau de Catalunya en Comú a nivel catalán. Nos pidieron esperar a las elecciones de febrero para anunciarlo.
¿Y qué pasó?
El resultado fue el que fue. Al día siguiente pedimos oficializarlo, pero desde Barcelona nos dijeron que ya era inviable pactar con Junts. En ese momento se buscó un acuerdo solo con la CUP.
Tampoco fue fácil...
Tardamos meses en hacer la asamblea, nos plantamos en mayo de 2021. En la explicación del Tótem los miembros de la coordinadora omitieron cosas, como que había un acuerdo previo firmado con Junts. Se votó a favor de pactar con la CUP, con mi apoyo.
Y el 14 de junio de 2021 ERC dice basta y firma un acuerdo con la CUP... y JxTGN.
Es que llevábamos un año y medio retrasando intencionadamente una ampliación de gobierno...
El partido decía que no avalaría un pacto «con la derecha»
Yo siempre decía que necesitábamos manos y que Junts se ajustaba al acuerdo de gobierno con ERC y CUP. Era una victoria política que partidos de centro y de centro-derecha se sumaran a un gobierno de izquierdas.
El 15 de junio de 2021 se presentó la ampliación de gobierno... sin usted ni Aguilar.
Ese día se produjo uno de los momentos más esperpénticos que he vivido como concejal. Hicimos una reunión con videollamada con la cúpula de Comuns Barcelona. La imagen fue dantesca: los miembros del grupo municipal de Tarragona tomando nota y recibiendo órdenes de lo que debían hacer. En ese momento me fui porque nadie nos debía ordenar qué hacer. Es que nos llegaron a decir que lo que pasara en TGN no importaba, sino que lo relevante era el Parlament.
Se quedó en el gobierno y lo expulsaron...
Esa tarde ya hay un acuerdo con el PSC para hacer moción de censura y echar a Ricomà.
Pero no se presentó...
No, porque decidí no dimitir.
¿Si hubiera dimitido la moción se habría presentado?
Todo lo que ha pasado desde 2019 ha sido porque el PSC ha intentado gobernar por todos los medios. El 15 de junio de 2021 tenían acordada la moción de censura.
¿Los Comuns aceptaban que volviera Ballesteros?
Era una venganza contra ERC, pero sin Ballesteros. Él y Floria dimitían y se habló de Sandra Ramos o Carla Aguilar como alcaldesa.
¿Ricomà sigue de alcalde gracias a usted?
Mi resistencia contribuyó a que el gobierno del cambio permaneciese. ¿Qué íbamos a hacer con un gobierno de 8 ó 9 ediles con el PSC y el apoyo externo de PP y Ciudadanos? Era inviable.
¿Se planteó dimitir?
No, soy muy cabezón.
¿Ha tenido ofertas para seguir?
No.
¿A quién votará el 28M?
A ERC.